Bruno D'Armagnac: «Alegría es la firma del circo»

IVANNIA SALAZAR REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

El espectáculo se presenta la próxima semana en Santiago.

04 dic 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Bruno D'Armagnac es un apasionado de su trabajo. Y no es para menos: es el director artístico del espectáculo más emblemático del famoso Circo del Sol, Alegría, que se presenta la próxima semana en Santiago.

-«Alegría» lleva 17 años en escena. ¿Cuál es la clave de su éxito?

-La calidad de la producción y el hecho de que nunca subestimamos a la audiencia. Alegría fue creada por un genio, Franco Dragone, y es muy especial porque la carga del espectáculo recae sobre los artistas, el factor humano es lo más importante y el nivel sube año tras año. Y al público eso le gusta. Es un show de alta energía que en algunos momentos es también nostálgico. Hay música, comedia, danza y acrobacia, pero no es solo eso: es un viaje, una intensa experiencia teatral.

-¿Cuál es la diferencia entre «Alegría» y otros espectáculos?

-Para quien no conoce al Circo del Sol, Alegría es una excelente forma de empezar a hacerlo. Alegría es la firma de la compañía. Es donde empezó todo a gran escala, la génesis del estilo que nos caracteriza.

-¿Por qué eligieron una palabra en castellano para bautizarlo?

-Los creadores querían una palabra corta, poderosa, que transmitiera felicidad, júbilo, energía. Y alegría está en un idioma precioso que cumple con todo eso.

-¿Qué pretenden provocar en el público?

-Tocarlo. Lo más importante que tenemos los seres humanos son nuestras emociones. Y con Alegría queremos tocar las emociones de la gente, sus sentimientos. Y creo que hasta ahora nos está funcionando.

-¿Es difícil trabajar con gente tan talentosa? ¿Hay problemas de «ego» dentro del equipo?

-Hay 55 artistas de muchas nacionalidades, todos de muy alto nivel, incluso con récords olímpicos y formados para ser los mejores. Es verdad que hay grandes egos aquí. Pero en total somos cien personas que vivimos juntas, viajamos juntas, trabajamos juntas y tenemos que llevarnos bien. Por supuesto no todo el mundo ama a todo el mundo, pero tenemos formas de resolver los conflictos. Alegría tiene la reputación de tener una atmósfera muy agradable. Es como una gran familia. Tenemos que hacer que funcione fuera del escenario para que funcione en el escenario.

-El circo empezó en la calle y ahora es uno de lo más importantes del mundo. ¿Qué les espera en el futuro?

-Lo que la compañía quiere es seguir produciendo puestas en escena con la mejor calidad posible y ser muy innovadores. Aprovechar la tecnología y a los nuevos creadores para deslumbrar a la audiencia con espectáculos en vivo. Al ser un circo, los acróbatas son muy importantes, así que buscamos tener siempre a los mejores. Además lo que hacemos es peligroso, por eso nos tomamos el tiempo de hacer bien las cosas. En eso también radica nuestro éxito.

-De los nueve actos de Alegría, ¿tiene alguno favorito?

-Sí y no. Vengo del mundo de la danza, así que me siento más tocado por las coreografías. La contorsión de las chicas de Mongolia está muy cerca de la perfección, es un acto muy intenso. Pero todos los actos son hermosos y necesarios para el equilibrio. Hay algunos que realmente amo, pero me gustan muchísimo todos. En este trabajo tienes que enamorarte de los artistas y del espectáculo.