La artista y Pablo Candamio homenajean el bimilenario faro
01 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Dos años como patrimonio de la humanidad. Es el aniversario que este mes celebra la torre de Hércules de A Coruña. La exposición Miradas dunha Torre, inaugurada anoche en el palacio de María Pita, es la primera de las celebraciones y en ella participan el fotógrafo Pablo Candamio y la artista Ánxeles Penas. Ambos, «cautivados por la belleza, el magnetismo y la magia de la coruñesa torre de Hércules, buscan reflejar sus caras ocultas y dimensiones artísticas a través de sus personales miradas», argumentan en el catálogo de un proyecto que también puede seguirse en Internet (www.miradastorre.com)
Tal y como recordó Ánxeles Penas, el proyecto de esta exposición arrancó hace tiempo. «Pablo Candamio tivo a idea de facer un libro sobre a torre e pediume un poema», evoca la artista, que desde el año 2005 había hecho grabados y algún óleo usando el monumento como tema central. De aquella idea inicial, en la que también participó el fotógrafo Xosé Manuel García Feijoo, salió un libro del que solo se han editado tres ejemplares, uno para cada uno de los participantes, cuyo titulo es Tres miradas e unha torre y que estaba pensado como «un libro-agasallo», explica Penas.
«Logo falamos co Concello, coa concelleira de Cultura, María Xosé Bravo, á que lle pareceu moi ben facer unha exposición a partir do libro», explicó la poeta, pintora, escultora y crítica de arte. Candamio tuvo palabras de elogio y agradecimiento para la «profesionalidad» de María Xosé Bravo: «Independientemente de los colores, esto está aquí gracias a ella y a su confianza en la calidad de las obras».
Ánxeles Penas escribió un poema para esta exposición, en gallego y en castellano, «un texto como se a que falara fora a Torre». El poema ocupa una parte destacada de la exposición y comienza así: «Ábrese o meu ollo cara o infindo / e o infindo óllame dende os cumios estelares, / verte sobre min resplandor impalpábel».
En los preparativos de la muestra vieron sus obras sobre la torre, con lo que la participación de Ánxeles Penas en la exposición va más allá de la lírica: «Fixen máis gravados e un óleo grande, que é unha homaxe a Giannini con palabras do diario de a bordo que el escribiu cando marchou da Coruña. Ese texto é unha preciosidade». Fue precisamente ese texto del último gran reformador del faro, que concluye calificándolo como «el ojo irresistible de Dios», el que leyó Penas ante los numerosos asistentes al acto inaugural. Este óleo, que tiene como título A gardiana do L, «porque en morse parece que significa A Coruña; aparece a torre ergueita sobre un círculo, rodeada do morse ?.-..?, da rosa dos ventos, e debaixo, a torre de noite. Ese texto de Ginannini aparece velado».
Ánxeles Penas también destacó en el acto inaugural la visión cósmica de su obra, una creación que «está chea de simbolismo».
La mitología existente alrededor de la torre de Hércules empapa la obra de Ánxeles Penas, que ayer recordaba que el espacio había sido definido como un punto de encuentro entre el cielo y la tierra, «de aí a loita entre Xerión, que era a escuridade, e Hércules, que traía o sol». La poeta alude a una frase de Valle-Inclán, «soy poeta y tengo derecho al alfabeto», para argumentar que por eso ella fabula y cogió «o torques de Xanceda, que é maravilloso, que nunha das obras está abrazando a Torre como unha forma de referirse á orixe nosa no mundo celta». Este lienzo lleva por título «A luz da Coruña», pero no es el único en el que aparece dicho torques, ya que figura en el grabado Cruzando vectores da noite, con el monumento flotando en el espacio. «Na torre escribín o poema de Rosalía dedicado a sir John Moore», detalla la artista.