C ada vez los Globos de Oro se parecen menos a los Oscar, pese a ser la crítica extranjera acreditada en Hollywood la que los otorga con vitola de marcar el rumbo de la calidad cinematográfica en cada temporada. En esta ocasión no hubo sorpresas con las nominaciones a los Globos. Mientras en la categoría de comedia la elección es cuestionable (entra incluso la coyuntural The touris t, con Angelina Jolie?), la de drama incluye peliculones como La red socia l, Orige n e incluso la británica El discurso del re y, que huele a Oscar en varias categorías. Pero faltan filmes cuyo estreno se está apurando en Norteamérica para que puedan aspirar a la estatuilla de la Academia y la crítica no ha podido o no ha querido inclui r.
Camino a la libertad
(Peter Weir) y
True Grit
(Joel y Ethan Coen) están entre ellas. ¿Qué hay de Clint Eastwood y su reciente
Más allá de la vida
? ¿Tan mal lo hace ahora ese viejo de la cámara? Ya puestos, la categoría de mejor película extranjera deja muchísimo que desear. Ni la hispanomexicana
Biutiful
merece estar entre las cinco finalistas (Iñárritu perdió a su brújula, Arriaga), ni la francesa
The concert,
pese a ser obra notable. Los Globos de Oro se acercan cada vez más al tirón mediático de los Oscar, pero, si antes marcaban tendencia, ahora se parecen más a un tótum revolútum de criterio muy discreciona
l.