Junto a las galerías Ad Hoc y Bacelos, que ya estuvieron este año, acudirá en el 2011 la compostelana SCQ
20 nov 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Arco2011 se presentó el jueves como una feria «austera», «más reducida» y adaptada a los tiempos de crisis. Pese a todas estas limitaciones en su próxima edición, la feria de arte contemporáneo más importante de España no pinta inicialmente mal para la representación gallega. Si el año pasado fueron dos las galerías seleccionadas, Ad Hoc y Bacelos, ambas de Vigo, para la próxima cita de febrero, a estas mismas dos firmas se les ha sumado SCQ, de Santiago, después de tres ediciones sin concurrir. Serán tres representantes, a pesar de que la cifra total de galerías en Arco2011 se ha reducido casi un 20%, con 190 de todo el mundo.
Ad Hoc y SCQ concurren en el programa general, con un espacio más amplio para mostrar sus obras y la posibilidad de presentar a un amplio número de artistas. Bacelos, por su parte, participa en Arco 40, el programa con puestos de 40 metros cuadrados en los que puede exponerse obra de uno o tres creadores.
Las tres galerías han optado por llevar obra multidisciplinar, desde la pintura a la fotografía y los vídeos, más pujantes en los últimos años. Ad Hoc ya tiene claro que acudirá con obra de autores como Xoán Anleo, Suso Fandiño, Carme Nogueira, la tejana Daniela Edburg -muy bien acogida por los coleccionistas franceses, según explica la directora de la galería, Inés Ramiro-, siempre con una importante apuesta por los artistas gallegos.
Bacelos acudirá con obra del ponferradino Ángel Núñez Pombo, de Xisco Mensua y del fotógrafo coruñés Manuel Vilariño. «Apostamos por un proyecto que conjuga artista joven y artista consagrado y siempre intentamos contar con presencia gallega», explica Daniel Vila.
En el caso de SCQ, aunque no detallan los titulares de su obra, aseguran que van a procurar abarcar desde lo gallego a lo más internacional.
Y a pesar de que el objetivo de las ferias es vender, en las galerías quieren compartir el optimismo del director de Arco, Carlos Urroz, que augura buenas ventas. «La edición del 2009 fue la peor; la del 2010 mejoró mucho, con lo que, aunque las cosas no están fáciles, un poco de optimismo viene bien», defiende Inés Ramiro, que coincide con Daniel Vila en que el mercado comienza a moverse.