La Seminci potencia el documental con dos cintas de contenido ecológico

Miguel Anxo Fernández REDACCIÓN/LA VOZ.

CULTURA

El festival quiso aportar su grano de arena al 2010 como Año Internacional de la Diversidad Biológica, con dos interesantes documentales.

27 oct 2010 . Actualizado a las 02:09 h.

Que el documental vive su edad de oro y tutea en las pantallas al cine de ficción es una realidad que se confirma en lo que va del siglo. La Seminci hace años que apostó por este formato en su sección Tiempo de Historia, ahora con carácter competitivo y por la que están pasando piezas muy logradas. En esta ocasión, el festival quiso aportar su grano de arena al 2010 como Año Internacional de la Diversidad Biológica, con dos interesantes documentales.

Gasland es la segunda película de Josh Fox, que pareciera ser discípulo aventajado de Michael Moore. Al igual que el autor de Bowling for Columbine o Sicko , Fox remueve la llaga del espinoso asunto de la explotación del gas natural, sobre todo por parte de la empresa norteamericana Halliburton cuando la presidía Cheney, más tarde vicepresidente de EE.UU. y promotor de normativas lesivas para el agua potable y el medio ambiente. Podrá verse en breve en las pantallas españolas. Todavía no ha encontrado distribuidor el contundente Solutions locales pour un desordre global, de la francesa Colinne Serreau, que recogió esclarecedores testimonios en Francia, Ucrania, Brasil y la India para cuestionar el actual modelo agroalimentario.