La lluvia y los turistas de Santiago se cuelan en el rodaje de Almodóvar

EFE

CULTURA

Los planes de grabación de la tarde se retrasaron dos horas, pero los curiosos aguantaron en la calle mismo con la lluvia.

23 ago 2010 . Actualizado a las 22:30 h.

La lluvia y los turistas de Santiago se han «colado» hoy en el rodaje de la nueva película de Pedro Almodóvar, La piel que habito, que el director ha comenzado a filmar en Santiago y que se prolongará durante once semanas en diferentes escenarios como el pazo de Oca, Madrid y Toledo.

Para la tarde estaba prevista una escena con la participación de Antonio Banderas en el casco histórico. Durante toda la tarde, la zona fue acordonada ante una multitud expectante que, cámaras de foto en mano, trataban de captar a los protagonistas, mientras desde la producción de la película se pedía a los paseantes que vaciasen la calle para poder rodar.

«No se puede grabar, no se puede ver a nadie», se pidió con un megáfono a la multitud congregada, aunque de poco sirvió su petición porque los turistas se agolpaban para intentar ver a los actores que podrían aparecer por allí. La lluvia retrasó los planes de grabación dos horas, pero los curiosos aguantaron en la calle hasta las 17.45 horas, cuando llegó Almodóvar y poco después lo hizo Elena Anaya.

Con la ayuda de la Policía se logró cortar un tramo de la calle para mantener a los curiosos alejados y así la grabación de la película comenzó a las 18.00 horas con Anaya dentro de un taxi.

La jornada del rodaje empezó a las nueve de la mañana, bajo lluvia, en el instituto San Clemente reconvertido para la ocasión en ficticio cuartel de la Guardia Civil. En días sucesivos, la acción se trasladará a pistas rurales compostelanas, a la vecina Ponte Ulla o al pazo de Oca, entre otros puntos.

Abordado por los periodistas antes del inicio de los ensayos, Almodóvar reconoció que él y su equipo, algo más de medio centenar de personas, están «muy contentos» con el rodaje de La piel que habito, inspirada libremente en la novela Tarántula, del escritor francés de Thierry Jonquet.

Pasadas las 10.35 horas, Almodóvar salió del instituto San Clemente, en el casco histórico de Compostela, y se dirigió hacia el set preparado para grabar una escena exterior con la actriz valenciana Susi Sánchez.

Acción

Ataviada con un vestido violeta oscuro y negro confeccionado por la diseñadora belga Diane Von Furstenberger, la intérprete valenciana escuchó atentamente las directrices de Almodóvar y el equipo cinematográfico ordenó el comienzo de la filmación con los gritos de «acción, figuración, acción».

Las cámaras atrajeron a espontáneos, que, en su mayoría, se mostraron sorprendidos por el rodaje de Almodóvar, pues desconocían que estaba programada una grabación en la capital gallega. «Nos hemos sorprendido y hemos dicho ¡vamos para allá!, a ver si podemos sacar una fotillo», explicó una pareja procedente de la localidad andaluza de Jaén, quien llegó hoy a Compostela para veranear en la ciudad.

Ser testigo de la organización de un rodaje cinematográfico más que por ver en persona a Almodóvar fue otro de los argumentos aportados por los caminantes para quedarse a disfrutar de la representación. «Más emocionado por ver todo el montaje, el lío que tienen, y la complicación para rodar. Me parece complicadísimo con el tráfico, la gente, la lluvia», explicó un paseante.

Uno de los figurantes, Manuel Antón García, valoró la «gran experiencia» de participar en una película de Almodóvar, mientras que Elena Cajaraville, que ya había sido seleccionada como extra para anuncios publicitarios, señaló que grabar con el director manchego se lleva «bien».

Mientras se sucedían las escenas, los viandantes atendieron a las indicaciones de la organización, quien les solicitó no hacer fotografías para evitar que el ruido de los «clics» de las cámaras se mezclasen con los sonidos de la película.

La colocación de un cartel con la inscripción de «paso cortado» alertaba a los conductores de restricciones viarias en la zona y agentes de la Policía Local reorganizaban el tráfico con cortes y desvíos de circulación «en momento puntuales», explicó a Efe uno de los guardias.

Tras una hora repitiendo el mismo cuadro, los montadores recogieron el material cinematográfico para trasladarlo al instituto de San Clemente y seguir rodando allí.

Protagonizada por Antonio Banderas, Elena Anaya, Marisa Paredes, Jan Cornet y Roberto Álamo, La piel que habito cuenta también con la participación de Blanca Suárez, Eduard Fernández, José Luis Gómez, Bárbara Lennie, Susi Sánchez, Fernando Cayo y Teresa Manresa.

En el proyecto, que dispone de un presupuesto de diez millones de euros, vuelven a colaborar técnicos asiduos a la filmografía del cineasta manchego, entre ellos José Luis Alcaine como Director de Fotografía, su fiel José Salcedo como montador y su imprescindible músico Alberto Iglesias.