La industria discográfica se manifiesta ante Industria contra la piratería

EFE

CULTURA

Artistas como Rosario, Antonio Carmona, Aute, Loquillo, Tamara, Conchita o Chenoa han gritado que la música es cultura, pero también empleo.

01 dic 2009 . Actualizado a las 22:52 h.

Unas trescientas personas, entre las que se encontraban músicos y cantantes famosos, además de productores, distribuidores, mánagers y demás trabajadores de la industria discográfica, se han concentrado hoy ante el Ministerio que dirige Miguel Sebastián para exigir que se acaben las descargas ilegales.

En un pequeño escenario que se montó a primeras horas de la mañana frente al Ministerio de Industria, en la madrileña plaza de Cuzco, artistas como Rosario, Antonio Carmona, Luis Eduardo Aute, Loquillo, David de María, Tamara, Conchita o Chenoa han gritado junto al resto de trabajadores que la música es cultura, pero también empleo.

Ese ha sido el eslogan que han elegido para sus pancartas y que han coreado intensamente cuando el ministro accedió a recibir a un grupo de representantes, formado por los artistas José María Sanz («Loquillo») y Luis Eduardo Aute, y por los presidentes de Sony Music, Carlos López, y de la asociación de Productores de Música de España (Promusicae), Antonio Guisasola.

Según han explicado tras entregar al ministro una copia del manifiesto que han firmado más de 2.000 artistas españoles, Sebastián se ha mostrado «receptivo».

«Ha quedado claro que el control de la piratería comercial no nos sirve -ha dicho Guisasola- y se ha comprometido a dar una respuesta de aquí a final de año», (que también es el plazo que se ha marcado la Comisión Interministerial contra la piratería para hacer públicos los resultados de sus trabajos).

Se trata de la primera vez que discográficas, productores, mánagers, artistas y demás trabajadores que viven de la música se rebelan juntos, porque «el tema es ya urgente».

«Les hemos pedido que lo enfoquen como es en realidad y que no se busquen atajos sino medidas valientes, que no nos basta con atacar a las páginas web como objetivo prioritario, que necesitamos que se prohíban las descargas 'peer to peer' (P2P o usuario a usuario)», ha resumido Guisasola.

Según Guisasola, el 70 por ciento de las descargas ilegales de música en España se producen por este sistema, «más del doble que en la Unión Europea» y la solución que ofrece el Gobierno es una respuesta «mutilada» que sólo afecta al 30 por ciento del problema y, por tanto, no les sirve.

Guisasola reconoce que hay que mejorar la oferta legal y tener alternativas al consumo ilegal, pero ha indicado que también debe existir una repulsa social porque «no puede ser que cualquier tienda legal esté al mismo nivel que eMule».

Por su parte, Emilio Santamaría, presidente de Asociación de Representantes Técnicos del Espectáculo (ARTE), que la industria discográfica ha perdido un 40 por ciento de sus empleos: «estamos hartos de ver cómo desaparecen estudios de grabación y miles de técnicos, de estructuras, de luz, de sonido (...) somos más de 100.000 personas a las que no se nos da importancia, es momento de hacernos oír», ha dicho.

«Esto es el principio», ha dicho el veterano Aute, y la cantante Rosario Flores también ha reclamado atención: «llevamos seis o siete años de crisis y ya nos ahogamos».

«Somos muchas familias las que vivimos de la música y los artistas, todos, también los curritos, representamos a España por los países», ha afirmado la artista, quien también protesta porque «dejamos crecer a la gente joven con la filosofía de que la música no se paga, y se paga, como se paga todo».

Para la cantante gaditana Mercedes Trujillo («Merche») la industria musical está «muy mal» por culpa de la piratería: «en mi discográfica hay un 20 por ciento de la plantilla que había antes.

Tu entorno se va deteriorando, hay muchos puestos de trabajo que se quedan libres y nadie los vuelve a ocupar», ha explicado a EFE.

Chenoa, que ha acudido a la concentración «para dar la cara», ha destacado a EFE que «estamos todos unidos y ha llegado el momento de reclamar que la música es cultura, pero con seriedad».

En ese mismo sentido, «Loquillo» ha reconocido que algunos «caras» han hecho daño a la imagen de quienes ahora reclaman ayuda: hablamos de trabajadores y si no se hace algo, ha dicho, «estaremos a expensas de los que vengan de fuera: nos estaremos jugando nuestra propia cultura».