La historia de un chabolista de Bombay arrasa en los Oscar

Ch. L. Monjas

CULTURA

24 feb 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Era la favorita en todas las apuestas y arrasó. Slumdog Millionaire , la historia de un chaval pobre de los suburbios de Bombay a punto de ganar el concurso ¿Quién quiere ser millonario? , convenció a los académicos de Hollywood y triunfó en la que fue la 81.ª edición de los Oscar al lograr ocho de los diez galardones a los que optaba, incluidos los de mejor película y director -el británico Danny Boyle-.

Slumdog Millionaire

no encontró competencia, ni siquiera en la superproducción con mayor número de aspiraciones de la noche, El curioso caso de Benjamin Button , que convirtió sus trece opciones en tres premios técnicos -maquillaje, efectos especiales y mejor dirección artística-. Fue la gran perdedora de una velada en la que brillaron con luz propia Kate Winslet y Sean Penn en la categoría de mejores actores protagonistas, mientras que Penélope Cruz y el desaparecido Heath Ledger fueron los mejores intérpretes secundarios del 2008.

Un presupuesto modesto de 15 millones de dólares -lleva recaudados más de 160-, un reparto desconocido, un guión creado por el autor del exitoso filme Full Monty -Simon Beaufoy-, un director que siempre juega al despiste -Boyle- y una historia que ha levantado polémica en la India. Estos son los ingredientes de la gran triunfadora de la gala de los Oscar, que presentó el australiano Hugh Jackman, con un total de ocho estatuillas: las de mejor película, director, guión adaptado, banda sonora original, canción, fotografía, montaje y sonido. Unos trofeos que, pese a las críticas que denuncian que la película hace explotación de la miseria, han llenado de orgullo al país asiático.

La fantasía de Slumdog Millionaire se impuso a una de las cintas de los grandes estudios, que tiene como gancho a Brad Pitt, quien nace con ochenta años y rejuvenece hasta ser un bebé en El curioso caso de Benjamin Button , filme firmado por el norteamericano David Fincher. La estrella Pitt se fue de vacío porque el galardón al mejor actor protagonista del 2008 recayó en Sean Penn por encarnar a un activista gay en Mi nombre es Harvey Milk . Para el comprometido Penn es el segundo Oscar de su carrera, el mismo número de estatuillas que se llevó el filme de Gus Van Sant, también reconocido en la categoría de mejor guión original -Dustin Lance Black-. Sean Penn, que dedicó su discurso a defender el derecho a casarse de las parejas homosexuales, fue el único intérprete norteamericano con Oscar, que esta vez distinguió como mejor actriz a la británica Kate Winslet por El lector . Tras estar nominada en seis ocasiones al premio dorado y haberse llevado el Globo y el Bafta, entre otros, Winslet se impuso a unas rivales entre las que se encontraba la veterana y siempre creíble Meryl Streep - La duda -.

Galardón póstumo para Ledger

El desaparecido australiano Heath Ledger ganó un Oscar al mejor actor de reparto por encarnar a Joker en El caballero oscuro . Este Oscar póstumo fue recogido por los padres y la hermana del joven actor, en uno de los momentos más emotivos de la gala, junto a la aparición del veterano Jerry Lewis para recibir el Oscar honorífico. Los casi 6.000 miembros de la Academia también distinguieron el vestuario de The Duchess ; la cinta de animación Wall.E ; la historia japonesa Departures (mejor película extranjera) y el documental Man On Wire .