La actriz británica estrena Revolutionary Road, su reencuentro con DiCaprio, que le ha dado un Globo de Oro.
23 ene 2009 . Actualizado a las 22:00 h.Kate Winslet estrena hoy Revolutionary Road, película en la que ha recibido órdenes de su marido Sam Mendes y que ha supuesto su reencuentro con Leonardo DiCaprio, del que se enamoró en la superproducción Titanic. Doblemente galardonada en los Globos de Oro por esta producción y por El lector, la antaño curvilínea intérprete fue la que leyó el guión de Justin Haythe basado en la novela de Richard Yates. Tanto le gustó la historia que se la pasó a Sam Mendes.
¿Qué le llamó la atención de «Revolutionary Road»?
Richard Yates escribió el libro sobre el matrimonio de Frank y April Wheeler, un estudio sobre una pareja que sufre una crisis en su matrimonio en una época en la que las mujeres estaban muy limitadas. Era una obligación ser feliz. No solo tenían que aceptar su realidad, sino que tenían que estar contentas con ella. Pero mi personaje quiere algo más, se siente profundamente infeliz y sufre. Ama a Frank [DiCaprio], pero está sola. Hemos contado la historia de dos personas que no quieren seguir juntas, pero que tratan por todos los medios de salvar su matrimonio. Imagino que mucha gente se identificará con esta historia.
¿Cuándo se sumó su marido al proyecto?
Me llegó el material cuando todavía no había director, algo que no es muy habitual. Hubo suerte y Sam quiso dirigir el libreto que enviamos a Leo, con quien yo llevaba muchos años buscando un guión que pudiéramos interpretar juntos.
¿Ha sentido alguna vez que iba por el camino equivocado?
?La vida es un camino en el que siempre tienes que saber qué es lo que te hace feliz. Es un proceso en el que cada uno tiene que encontrar esos pequeños detalles que nos llenan de ilusión. Todos hemos sentido alguna vez que estábamos en el trabajo o con la pareja equivocada.
¿Qué tiene de April?
Soy una persona muy positiva porque soy feliz conmigo misma. Me gusta mi vida, tengo un marido y dos hijos maravillosos, y un trabajo que amo. Gracias a este oficio he realizado muchos de mis sueños. April no tiene esa posibilidad y eso le produce una frustración emocional.
¿Le resultó difícil meterse en su piel?
Sí. Me exigió mucho, y me gustó porque es lo que espero de este trabajo. Me gusta ir a casa con cosas en las que pensar y nuevas técnicas para futuros papeles. April me ha enseñado a no planear demasiado las cosas. Puedes prepararte mucho, pero una vez en el plató tienes que estar dispuesto a que todo cambie. Con Sam aprendí que no pasa nada si estoy asustada, y que no tengo que tener todas las respuestas.
Trabajar con un material tan íntimo y que la dirija su marido no debe ser sencillo.
No tuvo ningún impacto en nuestro matrimonio. No fue negativo, al contrario, nuestra relación salió fortalecida. Sam es un gran director, es brillante y solo me vio como su actriz. Él es distinto con cada actor.
Había mucha gente esperando ver otra vez a la pareja Winslet-DiCaprio.
Con Leo es una sorpresa cada día. Lo he visto crecer como actor, pensaba que era imposible que se hiciera mejor actor con el tiempo, pero lo ha conseguido. En estos doce años se ha hecho muy fuerte, ha aprovechado las oportunidades. Es un gran profesional al que considero un hermano. Estamos muy unidos, hemos mantenido nuestra amistad a lo largo de estos años y hay química entre nosotros. Este filme no tiene un gran presupuesto. Estábamos en esa casa diminuta, opresiva, claustrofóbica, rodeados de tanta gente... Era como una olla a presión, pero los dos nos encontramos muy bien juntos, ensayando los diálogos, hablando de las escenas, compartiendo ideas...
Les ha costado mucho encontrar una historia. Supongo que ofertas no habrán faltado.
Tuvimos varias propuestas, pero ninguna era el proyecto adecuado. Los dos sabíamos que era imposible rodar un filme como Titanic. Era egoísta, quería volver a trabajar con Leo, pero los dos necesitábamos regresar con una buena película. Y Revolutionary Road lo era.
?¿Cómo prepara los personajes?
Es una combinación entre cómo lo veo yo y lo que el director quiere de mí. Es un privilegio explorar las emociones de distintos personajes. A veces robo cosas de mis amigos, de mi familia, me fijo en sus movimientos, su forma de reírse. Cuando se trata películas de época estudio el período histórico. Cada papel tiene sus propias reglas, pero también es muy importante creer en el director, confiar en él y dejarte guiar.
Su estreno en el cine fue en 1994 con «Criaturas celestiales», de Peter Jackson.
Deseo tener la misma sensación de libertad que tenía entonces, nada me daba miedo. Fue estupendo hacer esa película sin saber nada. Ahora entiendo mucho más de cine, me fijo en muchos elementos. Antes me daba de otra forma, mientras que en estos momentos hay mañanas en las que me levanto y tengo que convertirme en otra persona y me digo a mí misma «Kate, eres un fraude, no puedes hacer esto. Te van a echar». Pero luego me doy cuenta que tengo mucho que aprender. Es muy importante permanecer abierto y divertirte con lo que haces. Si al final del día no disfrutas, no merece la pena lo que haces.
Ha tenido nominaciones al Oscar y acaba de ganar dos Globos de Oro.
A mis 33 años he conseguido más de lo que yo esperaba como profesional. Ahora empiezo a sentirme mayor, me interesan otro tipo de personajes.
¿Quiere ganar el Oscar?
Ganar el Oscar significaría mucho porque te lo dan personas que están en la misma industria que tú, son compañeros, personas a las que quiero y admiro.