Juan José Ballesta: «Me gustaría ser Banderas cruzado con Bardem»

Ch.?L.

CULTURA

25 sep 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Juan José Ballesta guarda un buen recuerdo de San Sebastián. En el 2005 se coronó con el actor más joven reconocido con la Concha de Plata por su trabajo en 7 vírgenes y tres años después ha vuelto, esta vez acompañado de su pareja Vero y el hijo de ambos, para presentar La casa de mi padre , uno de los estrenos del Día del Cine Vasco que lleva la firma de Gorka Merchán y que protagoniza junto a Carmelo Gómez, Verónica Echegui, Álex Angulo y Emma Suárez. «No me hagas preguntas raritas. No opino ni de ETA ni de temas políticos. Voy a mi rollo, no soy de ningún partido y cuando veo en la tele a Zapatero o a Rajoy, la quito», avisa el intérprete, que en noviembre cumplirá 21 años.

El Bola da vida en este drama de Gorka Merchán a un pelotari. «Carmelo y yo tuvimos un profesor de pelota vasca y también de euskera», dice. Para Ballesta, este conflictivo joven que se desplaza en moto, bebe y fuma porros «empieza de una forma y acaba de otra muy distinta. Me gustó que evolucionara y también que es un papel distinto. Creo que es una historia muy real, me relacioné con gente de la kale borroka, memoricé lo que digo en euskera y me salió bien porque me decían que parecía de Donosti».

«Tiro en la cabeza»

Le cuesta más hablar de la polémica que ha levantado Tiro en la cabeza , de Jaime Rosales. «No sé lo que pasó, pero es muy feo que te abucheen. Si me lo hicieran a mí, me quedaría muy cortado, porque hacer películas es mucho curro y lleva mucho esfuerzo. Soy muy respetuoso, y si algo no me gusta, pues no aplaudo», asegura.

Más cómodo entre mayores que con gente de su edad -con Carmelo Gómez fue uña y carne, ensayaban y se iban de pinchitos y cañas, rememora-, Ballesta empezó en el cine con 11 años y se mantiene «por suerte».

No quedarse en un registro y huir del encasillamiento en chico de barrio es una prioridad para este chaval de Parla, barrio madrileño que ha cambiado por el campo, donde tiene una casa con animales y huerto. «He plantado puerros para hacer puré a mi hijo», cuenta Ballesta, que el próximo mes iniciará el rodaje de Bruc , legendario personaje catalán que ahuyentó a las tropas de Napoleón por el eco que provocaban los redobles de su tambor en las montañas de Monserrat. «Es una película de guerra, de acción, muy física, porque estoy todo el tiempo corriendo por el monte», , apunta el actor, que, si tiene que aprender catalán, «pues se aprende».

Lo que se le sigue resistiendo es el inglés. Y eso que está dispuesto a hacer las maletas y las de su familia y cruzar el charco. «Me gustaría ser Banderas cruzado con Bardem, al que tengo mucho aprecio. Banderas lleva mucho tiempo arriba, es una máquina, y a Bardem le he visto subir poco a poco hasta lo más alto. Pero ni me fijo ni copio a nadie, lo mío es pura intuición», advierte.