El escritor ourensano José María Pérez Álvarez ha ganado con La soledad de las vocales el Premio Bruguera de Novela, que falló este lunes su tercera edición. Dotado con 12.000 euros, este galardón que otorga el Grupo Z tiene la peculiaridad de ser fallado por un jurado unipersonal, en este caso la escritora y editora Esther Tusquets. Pérez Álvarez, conocido como Chesi, saltó a los titulares al ser víctima de un plagio luego reconocido por Alfredo Bryce Echenique. El peruano publicó en noviembre del 2006 en el Correo de Lima el artículo La tierra prometida, que fusilaba en buena parte el que Pérez Álvarez había publicado en el 2005 en la revista Jano con el título de Las esquinas habitadas.
Para Esther Tusquets, La soledad de las vocales «sorprende por la extremada economía del decorado y sobre todo el habilísimo uso de la reiteración». «No estamos ante una novela triste, y sí ante una novela implacable», asegura la responsable del fallo.
El narrador de La soledad de las vocales vive en un tugurio repleto de seres marginados y sin esperanza: un tapicero serbio, una ex nadadora, un par de homosexuales, un pintor y un discípulo de Joyce. Comparte además su habitación con el fantasma de una joven que se suicidó en el mismo cuartucho.
José María Pérez Álvarez (O Barco de Valdeorras, Ourense, 1952) colabora en la revista Jano y en la página web tallerediciones.com. Es también director de la colección de narrativa contemporánea de la editorial ourensana Duen De Bux.
Ha publicado títulos como La vida innecesaria (1988), Como se nada existiese (1993), Las estaciones de la muerte (1987), Un montón de años tristes (1999), Nembrot (2002) y Cabo de Hornos (2005).