El ente provincial critica que la negativa a sus planes museísticos para el dolmen se base en criterios estéticos
31 ene 2008 . Actualizado a las 02:00 h.Tras 19 años de retrasos en la puesta en valor del dolmen de Dombate, uno de los mejores ejemplares de arquietctura megalítica que se conserva, nada parece indicar que se vaya a encontrar una solución a corto plazo para el monumento.
El proyecto presentado y aprobado por la Diputación de A Coruña no gusta a la Xunta. Y mientras no se reforme, Patrimonio no permitirá actuación alguna en el dolmen. Desde la Consellería de Cultura se ofrecen a dialogar, pero desde la Diputación explican que todos los intentos de diálogo llevados a cabo hasta el momento no han dado fruto alguno.
La conselleira de Cultura, Ánxela Bugallo, explicaba que el volumen del edificio previsto en Dombate era la razón principal de que se frenase el proyecto: «Os nosos técnicos foron moi reacios e estiveron intentando chegar a un acordo para diminuír ese edificio», explicó la conselleira.
Sobre ese tema abundó el director xeral de Patrimonio, Felipe Arias: «Ese proxecto non convence aos nosos técnicos porque supón demasiado impacto sobre o dolmen», dijo, y repitió la posibilidad existente de volver a cubrir de tierra parte del dolmen para garantizar su conservación mientras no se desbloquea el proyecto. «Se eu fose o dolmen de Dombate ao mellor agradecía que me taparan, pero como forma parte da sociedad preferimos telo a vista», dijo Arias.
Mientras la Xunta se remitía a sus técnicos para frenar el proyecto de la Diputación, el organismo provincial, a través de su presidente, Salvador Fernández Moreda, se remitía a los suyos para justificar sus planes.
Cuenta Moreda que para Dombate se convocó un concurso internacional de ideas. En el jurado había arqueólogos, conservadores, representantes de Patrimonio de la Xunta e ingenieros. El elegido se aprobó por unanimidad. «É de un dos maiores expertos en musealización de Europa», explica Moreda.
Para el presidente de la Diputación, no está justificado que Patrimonio niegue los permisos: «Non lles gusta por razóns estéticas, non me parece razoable, cada un ten os seus gustos», dice.
Para Moreda, volver a enterrar el dolmen «é a peor das solucións». Sobre un posible diálogo entre las dos partes, explica que ya los hubo pero que no se llegó a acuerdo alguno. «Deberiamos culminar o proxecto facendo o que se aprobou», dice Moreda.
Sobre los planes de futuro de la Diputación tras la negativa de la Xunta, no avanza si habrá una modificación de la propuesta: «Cando me presenten os estudios técnicos tomarei unha decisión», indica Fernández Moreda.