Con su ensayo, Como lobos hambrientos: Los guerrilleros en la Guerra de la Independencia (1808-1814) , un estudio que él mismo define como «una reivindicación del fenómeno guerrillero», Fernando Martínez Laínez acaba de ganar la quinta edición del Premio Algaba de Biografía, Autobiografía, Memorias y Estudios Históricos. El volumen se presentó ayer en A Coruña, de la mano de la Fundación Ámbito Cultural de El Corte Inglés.
-¿Qué papel jugaron realmente las guerrillas españolas frente a la invasión francesa?
-Jugaron un papel importantísimo, decisivo. Por varias razones. En primer lugar, las guerrillas españolas supusieron una sangría constante para el Ejército napoleónico. La insurrección popular causó casi las dos terceras partes de las bajas que los franceses sufrieron en España. Es decir, más de 300.000 pérdidas. Y hay más razones. Los guerrilleros obligaron a los franceses a mantener presencia militar en la práctica totalidad de la Península, lo que supuso que el Ejército napoleónico se viese obligado a retirar tropas de puntos claves en los que se libraron batallas decisivas, como los Arapiles, en tierras de Salamanca, o también en Vitoria.
-¿Y cuál fue el verdadero papel desempeñado por la guerrilla gallega al hacerle frente a los ejércitos de Bonaparte?
-En Galicia el fenómeno guerrillero tuvo unas características muy peculiares. Los franceses entraron en Galicia persiguiendo al Ejército inglés de sir John Moore, que reembarcó en A Coruña, pero aquí las tropas de Napoleón se encontraron con una resistencia totalmente inesperada... ¡y espontánea! Toda Galicia se levantó en armas contra Napoleón. Y eso tuvo una importancia trascendental, porque impidió que el Ejército francés pudiera invadir Portugal, que era donde estaba el Ejército británico, el del duque de Wellington. Galicia fue el primer lugar de la Península en el que los franceses tuvieron que dar media vuelta y abandonar el territorio.
-¿En su opinión, cuál es la principal singularidad de la contienda en Galicia?
-La mayor singularidad de la resistencia de los gallegos fue que se concentró mucho más en la propia población civil, en las gentes de los parroquias, de los pueblos y de las aldeas, que en las partidas de guerrilleros propiamente dichas. En ese sentido fue un fenómeno, y lo subrayo, absolutamente espontáneo en el que participó el conjunto de la población campesina.
-¿Cómo valora usted el papel de Sir John Moore?
-John Moore simboliza, con su muerte, la resistencia del Ejército inglés en una ciudad tan llena de heroísmo como A Coruña.