El Pop Art regresa a Londres

Efe

CULTURA

La National Portrait Gallery presentará la primera exposición dedicada enteramente a retratos influidos por la estética pop.

23 ago 2007 . Actualizado a las 11:46 h.

Medio siglo después de que Richard Hamilton presentara en la exposición This is Tomorrow de la galería londinense Whitechapel su famoso collage Just what is it that makes today's homes So different, so appealing?', auténtico manifiesto del Pop Art, este movimiento vuelve con fuerza a la capital británica.

A partir del 27 de septiembre, la galería Gagosian, primero, y del 11 de octubre hasta enero, la National Portrait Gallery (Galería Nacional del Retrato), después, rinden homenaje a los más destacados representantes de ese movimiento artístico de ambos lados del Atlántico.

A ambas exposiciones hay que añadir la titulada The Painting of Modern Life (La Pintura de la Vida Moderna), que se inaugura el 4 de octubre en la galería Hayward y que incluirá asimismo varias obras de artistas pop junto a las de otros creadores influidos por las imágenes y técnicas de la fotografía.

En su irónico collage de 1956, el británico Hamilton utilizó diversos elementos de la cultura de masas estadounidense: entre otros, una chica de revista, un aparato de televisión, una moderna aspiradora o un chupa-chup gigante con la palabra pop, que sostiene un culturista a modo de raqueta de tenis.

El Pop Art iba a traspasar en efecto la línea divisoria entre la alta cultura y la llamada "cultura de masas" para dar igual importancia a los objetos cotidianos y producidos en serie y subrayar así el valor iconográfico de la sociedad de consumo.

Sus mejores representantes, desde Andy Warhol hasta Roy Lichtenstein, Claes Oldenburg, Robert Rauschenberg, el citado Hamilton, Peter Blake, David Hockney o Allan Jones, utilizaron como fuente de inspiración o modelo las revistas ilustradas, los carteles publicitarios, el cine o los cómics.

Bien tomasen prestadas esas imágenes para celebrar la sociedad de consumo, bien -algo mucho menos frecuente- para criticarla, los artistas pop ampliaron el campo de visión del arte a la vez que democratizaron la producción artística.

La exposición de la galería Gagosian se propone analizar el modo en que los artistas, tanto de los inicios del movimiento como los actuales, han respondido a las ideas continuamente cambiantes sobre el arte pop.

Documentará su surgimiento y desarrollo como una fuerza vital del arte contemporáneo y presentará las obras de unos cuarenta artistas de la primera generación, y su impacto en generaciones subsiguientes, que han continuado y extendido su plural legado, entre ellos Mike Kelley, Takashi Murakami, Richard Prince o Jeff Koons.

La National Portrait Gallery presentará la primera exposición dedicada enteramente a retratos influidos por la estética pop.

Presentará una cincuentena de obras de ese género de veintiocho artistas de ambos lados del Atlántico como los ya citados Warhol, Rauschenberg, Lichtenstein, Blake, Hamilton, Hockney, además de Mel Ramos, Tom Wesselman o Patrick Caulfield.

Una sección estará dedicada a Marilyn Monroe, uno de los iconos del siglo XX, e incluirá muchas imágenes importantes de la actriz que se mostraron por primera vez en una exposición de homenaje organizada en 1967 en la galería Sydney Janis, de Nueva York.

La tercera gran exposición del otoño, La Pintura de la Vida Moderna, de la Hayward, no se limita, por el contrario, al pop aunque en ella estén representadas figuras como Warhol y Hockney, sino que explorará cómo ésos y otros muchos pintores han utilizado la fotografía como fuente para crear imágenes del mundo que los rodea.

En ella se analizará cómo la fotografía ha influido no sólo en el contenido sino también en la técnica misma de la pintura: desde el difuminado del alemán Gerhard Richter, la meticulosa reproducción de la luz de flash en la obra del suizo Franz Gertsch o la utilización por Hamilton de bordes blancos como los marcos de las fotografías.