Juan Flórez se alquila: casi una veintena de bajos buscan dueño

VIVIR A CORUÑA

ANGEL MANSO

Las Viudas Cheese Bar protagonizó uno de los últimos cierres de la zona. Locales emblemáticos, como el del Opencor, todavía buscan inquilino

16 may 2023 . Actualizado a las 14:20 h.

La crisis del coronavirus, la inflación y el crecimiento constante del comercio electrónico están resintiendo el tejido comercial del centro de las ciudades, donde cada vez más locales buscan dueño. Un ejemplo claro, en A Coruña, es el mítico local del McDonald's de la calle Real. Vías cercanas como San Andrés o Juan Flórez sufren aún con mayor envite la subida de los precios y el cambio de hábitos de consumo de los ciudadanos. En la actualidad, es última céntrica y codiciada arteria cuenta con casi una veintena de inmuebles comerciales que están cerrados o a la caza inquilino. 

El caso más paradigmático es el local donde estuvo Opencor, que aún no ha encontrado poseedor. Los actuales dueños cuentan a La Voz que el principal inconveniente del inmueble es que es su gran tamaño, porque en realidad el precio del metro cuadrado es económico, esta a unos ocho euros: «Se han interesado algún supermercado y cadenas de gimnasios, pero les echa para atrás que sea tan grande y no tenga plazas de garaje». 

JESSICA VILOR

Otro de los bajos más con más lustre de Juan Flórez también tiene la verja echada. Es el del número 18, que se renta por 5.000 euros al mes. Victoria, de la agencia Remax Riazor, cuenta que «los precios del alquiler están muy altos, pero esto ocurre desde hace ya tiempo». No obstante, el valor de este inmueble se explica por su ubicación, muy cerca de la plaza de Pontevedra y de la de Lugo; y por su tamaño. En su opinión es un bajo ideal para poner en funcionamiento una clínica dental, un gimnasio o una tienda de ropa.

Alquileres difíciles de asumir 

El precio de los locales comerciales, en muchos casos inasumibles, es la principal razón que explican el cierres de negocios y la consecuente dificultad para que se produzca una apertura. Eddy, actual propietario del bazar La Luna, relata que «aquí cuando cierra un negocio tarda mucho en abrir». Así, pone como ejemplo el propio bajo de Opencor o la cafetería Keops, que ya suma varios años con la persiana bajada. Sin embargo, Ricardo Núñez, gerente de la inmobiliaria Urbenorte pone de relieve que en Juan Flórez es como si existiesen dos calles: «De la plaza de Vigo a la plaza Pontevedra el mercado del alquiler y la venta se mueve con rapidez». Un ejemplo es la llegada del Eroski Rapid, que además tiene en alquiler otro bajo cercano que utiliza de almacén. Esto no ocurre en el tramo que va desde la plaza de Vigo en dirección Cuatro Caminos, pues salvo en el reducto donde se encuentran Casa Ponte o Terra Mía, es más complicado que las transacciones fluyan.

Además, el agente inmobiliario señala que también hay diferencias entre las dos aceras, la de los números impares tiene más prestigio e interés para los comerciantes. Lo mismo opina Begoña Giménez, de Urbanismo del Norte. «La parte de la izquierda [si se va rumbo a Alfonso Molina ]es mucho más comercial», sentencia. 

Con todo hay excepciones, y en la zona más noble también se encuentran bajos en alquiler, como el que dejó Naturgy, que se trasladó a la calle Betanzos. También está el del número 33-35, que durante la época navideña tuvo un mercadillo solidario orientado a ayudar a la Cocina Económica; o el del número 74, que dejó una agencia de viajes. También acaba de decir adiós el mítico local Las Pepas, pionero en el campo de las hamburguesas gourmet: el jueves fue su último día antes del  traspaso. 

JESSICA VILOR

El Juan Flórez menos interesante 

A pesar de estos ejemplos, un simple paseo desde Alfonso Molina hasta la plaza de Pontevedra evidencia cómo el número de bajos cerrados va decreciendo. Ya al comienzo, en el número 144-142-140, se alquila a un precio competitivo el bajo de un negocio que se trasladó a la acera de enfrente. Ahora también está vacío el local donde estaba el único bazar chino de la vía y el número 108, donde hasta hace poco había un bar. En la parte baja del desnivel de Juan Flórez también hay otros dos bajos vacíos.

Otros míticos locales que siguen cerrados son el que pertenecía al establecimiento que hacía camisas a medida o el que dejó la farmacia Rascón, que se trasladó a pocos metros. En este grupo entra también el que tiene en frente, en la esquina de Juan Flórez con Marcial del Adalid.