La moda de la industrialización de los procesos y el auge de esta materia prima se han unido para construir las casas del mañana
27 mar 2023 . Actualizado a las 14:01 h.Las ganas por disfrutar de una vivienda con terreno que dejó la pandemia del coronavirus supuso un revulsivo para el sector de las casas prefabricadas, que se vieron como una alternativa más rápida y sencilla de conseguir ese deseo. Una tendencia que se ha reforzado por la falta de mano de obra en el sector de la construcción. Y por la alianza de la industrialización con la madera, un material de construcción que está volviendo con fuerza gracias su carácter sostenible.
Gemma Travería, directora del congreso de nuevas tendencias de la edificación Rebuild, que se celebra en Madrid del 28 al 30 de marzo, explica que la fabricación de viviendas o partes de ellas en cadenas de montaje y el uso de la madera son dos tendencias clave que marcarán el sector en los próximos años. Así, explica que la industrialización de los procesos es un mecanismo que permite resolver la falta e mano de obra en la construcción y utilizar de manera más eficiente las materias primas, lo que es clave en épocas como la actual, con el alza de precios.
Respecto la madera, la experta señala que este es un material que favorece caminar hacia lo objetivos de reducción de emisiones de CO2. «Es un recurso natural, prácticamente inagotable, descarbonizador y que se puede reciclar». En definitiva, una materia prima que está llamada a revolucionar el sector de la construcción, contribuir a su modernización y a que sea más sostenible. Un objetivo donde Galicia, comunidad en la que buena parte del territorio es forestal, aspira a convertirse en un referente en este cambio.
Casas prefabricadas modulares de madera de Ubuild
Ubuild es una de las compañías coruñesas (Francisco Rodríguez Otero, 3) que está especializada en la fabricación de vivienda en este material. Utiliza un sistema constructivo que parte de una estructura sólida y todas las uniones entre piezas y elementos se realizan por encaje y atornillado. Un método posible gracias al uso de la última tecnología en el mecanizado de la madera.
Este sistema permite que todas las piezas sean diseñadas para que encajen en ellas el resto de los elementos de la construcción. En concreto, los módulos de suelo, cubierta y fachada, encajan en las vigas y pilares de la estructura creando entre ellos varias cámaras de aire, que se pueden abrir o cerrar para poder tener calor en invierno y fresco en verano.
Casas prefabricadas de madera del Grupo Malasa
Esta empresa ha sido una de las últimas en lanzarse al sector. Suso Nantón, director de Operaciones del Grupo Malasa, cuenta que es un material que funciona, que es reciclable y es el futuro de la construcción: «Aquí nos está costando dar el salto, pero el porcentaje del uso de la madera va a dar la vuelta al mercado». Y pone de relieve que es una materia prima que sobresale por su alto rendimiento térmico y aislamiento acústico.
La propuesta que lanzó esta compañía el año pasado se basa en una construcción prefabricada, pero a medida. Así, manejan plazos de obra en parcela de tres a cuatro meses. Y el proyecto se elabora conjuntamente con el cliente. «No tenemos un modelo concreto, está hecha a medida de los clientes, sin limitaciones», añade.
