«¿Por qué tardaron tantos años en llegar los buses al centro?»

alberto mahía A CORUÑA / LA VOZ

SADA

EDUARDO PEREZ

Desde ayer, ya son 28 las líneas de transporte metropolitano que entran en la ciudad

27 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Todo el mundo está contento. Los usuarios de los buses metropolitanos hablan maravillas de la llegada del transporte al centro de la ciudad. Es «más cómodo», «más barato» y «más rápido». ¿Quejas? «Deberían poner más frecuencias», opina alguno. Por el resto, nada más que objetar que el hombre tardó 48 años menos en llegar a la luna que un vecino de A Laracha viajar en bus al centro de A Coruña sin moverse del asiento, sin transbordos. «Como un señor», zanja Manuel Reigosa, un empleado de zapatería que vive en Santa Cruz. Le cuesta el billete 93 céntimos y lleva tres meses utilizando la nueva parada de Entrejardines, el tiempo que lleva en funcionamiento desde que la Consellería de Infraestruturas implantase la llegada del transporte metropolitano al centro de la ciudad. Se está realizando en tres fases. En la primera, iniciada el 6 de noviembre, se pusieron en marcha once líneas procedentes de Oleiros, Cambre, Sada y Culleredo -por la avenida de A Pasaxe y otra por Alfonso Molina- y la del aeropuerto de Alvedro. Desde entonces, uno de cada tres viajeros de estas líneas utilizaron las nuevas paradas del centro. Muchos se preguntan «¿por qué tardaron tanto los buses en llegar al centro?».

Ayer arrancó la segunda fase, que trae al centro 17 líneas interurbanas más, que suman casi 900.000 desplazamientos por año. Se bajan en las paradas de plaza de Pontevedra, Entrejardines, plaza de Ourense y cuesta de la Palloza. Los usuarios procederán de Boedo, Meicende, Arteixo, Malpica, Caión, Carballo, Fisterra, Montouto, Cesuras, Abegondo, Oza dos Ríos, Curtis, Pravio y Fraís. Los horarios de estas líneas de bus se pueden consultar en la página web de la Consellería de Infraestruturas.

No hubo problemas. Ni atascos. Las cuatro paradas en la ciudad no se vieron colapsadas y los buses no supusieron mayor congestión de tráfico. «Va todo perfecto», decía ayer uno de los conductores.

¿Cómo hacían antes los vecinos de la comarca? Lo explica un usuario que coge a diario el bus que une Sada con Entrejardines: «Nos bajábamos en los Castros y desde ahí teníamos que coger el transporte urbano. Tardábamos más y nos salía más caro».

No todo es bonito. Sigue habiendo núcleos en el área con la parada más cercana a kilómetros. Les ocurre a los más de mil vecinos que residen en las urbanizaciones de la Zapateira, en la zona de Arteixo y Culleredo. Pese a que la línea más cercana es la de Tranvías de A Coruña, esta muere en la frontera de los tres municipios, «dejando en tierra de nadie a un millar de personas», critican desde la asociación vecinal.

Tampoco ha caído bien la entrada de los buses en la ciudad para el colectivo de taxistas. Han denunciado que las carreras han caído entre un 15 % y un 20 %, lamentan desde Teletaxi.

«Antes me tenía que bajar en la estación y coger dos buses más»

Se acabó el transbordo para Ana Cagigal. Suele coger el bus para viajar a A Coruña y desde hace tres meses se baja en Entrejardines. Antes, el transporte metropolitano la dejaba en la estación de autobuses y luego tenía que coger dos buses urbanos para llegar a su destino. «Ahora es una maravilla y se ve que no forma tanto tráfico como decían al principio que iba a ocasionar», dice. Tampoco entiende que hayan tenido que esperar tantos años para implantar estas paradas en el centro.

«Es una maravilla, pero el trayecto desde Sada son más de 40 minutos»

Es cierto que antes le llevaba mucho más tiempo llegar a A Coruña, pues tenía que tomar tres buses, dos de ellos, urbanos, pero a Celestino, vecino de Sada, le molesta que el trayecto dure más de 40 minutos. Por el resto, se muestra «encantado» de que los buses lleguen al centro y, además, «lo hacen en cuatro paradas». Es un ahorro en todos los sentidos, dice. Porque aunque el bus metropolitano tarde 40 minutos, antes había que sumarle, a veces, 20 minutos más.

«Los mayores somos los que más necesitábamos estas paradas»

Josefina Suárez no es una habitual del transporte metropolitano. Lo utiliza de vez en cuando y dice que desde que se implantó el plan para que los buses entren en la ciudad lo usa más. «Antes era un fastidio tener que llegar a los Castros, bajarse y coger un bus urbano para ir al centro. Ahora es distinto», afirma. Bajarse en Entrejardines es, para ella, «lo mejor». Cree que «los mayores somos los que más necesitábamos estas paradas»: si bien, supusieron «comodidad» para todo el mundo.