Oza-Cesuras y Cerdedo-Cotobade acaparan un fondo de 1,8 millones al no haber nuevas fusiones de concellos

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO

OZA-CESURAS

CARLOS PEREIRO

Un 71 % de la sobrefinanciación de la Xunta serán para el municipio pontevedrés, y el resto para el coruñés

13 oct 2020 . Actualizado a las 19:30 h.

Oza-Cesuras y Cerdedo-Cotobade eran cuatro concellos. Ahora son dos y este año se van a repartir 1,8 millones de euros con los que la Xunta premia las fusiones municipales, en estos casos rubricadas en los años 2013 y 2016, respectivamente. La fecha es importante en este punto, porque el compromiso de la Consellería de Presidencia distingue las cantidades a entregar: un 71 % es para las entidades unidas en el último lustro, como es el caso del nuevo ayuntamiento pontevedrés; y un 29 % para los que lleven entre cinco y diez años, que encaja con el coruñés. A partir de la primera de década de convivencia desaparece la sobrefinanciación autonómica y, en teoría, la ventaja contable quedaría a expensas de la capacidad de la entidad fusionada de rebajar sus gastos aprovechando las sinergias administrativas.

El empeño autonómico por reducir el número de municipios (313 en total) viene de las anteriores vacas flacas, en el 2012, cuando el Gobierno de Feijoo articuló una normativa para agitar a los alcaldes e invitarlos a hacer números para superar las diferencias fronterizas. El momento era especialmente delicado para los ayuntamientos, que vieron cómo el ministro de Hacienda lanzaba su ley de estabilidad financiera, metiendo en cintura a los regidores con las cuentas más inestables. Ocho años después, la salud de las finanzas locales ha mejorado por obligación y las fusiones han dejado de interesar, sin que tampoco se hayan desarrollado mucho más las mancomunidades, que era la alternativa para optimizar los servicios que proponían los alcaldes más reticentes a difuminar los bordes de sus municipios.

Pese al escaso interés por avanzar en nuevos procesos, la Consellería de Facenda mantiene siempre en las cuentas autonómicas un fondo dedicado a las nuevas fusiones, una cantidad que sería susceptible de aumentarse en el caso de que dieran varios casos en el mismo ejercicio. Al contrario, esa partida acaba siempre destinándose a otros menesteres a través de los modificados de crédito que se utilizar para mover cantidades de un departamento a otro. En principio, esa cantidad seguirá incluyéndose en las cuentas del 2021, porque de nuevo vienen tiempos complicados para las entidades locales, sobre todo para las de menor tamaño. Según la Red Localis (Universidade de Vigo), en Galicia hay 123 municipios en los que el 60 % o más de sus ingresos dependen de las transferencias que reciben de otras administraciones, unas cantidades que descenderán con la crisis a medida que la caída de ingresos se vaya trasladando a los presupuestos públicos. Todos son concellos pequeños con escasa capacidad de recaudación propia.