El BNG pide un simulacro para medir el riesgo y la Xunta estudia opciones de nuevas entradas
02 feb 2025 . Actualizado a las 14:02 h.La residencia asistida de mayores de Oleiros está a punto de iniciar el cambio de las cubiertas en todo el complejo. Esta situación comprometerá aún más el acceso al recinto, una curva de 90 grados muy cerrada, coronada en su punto central por un espejo que ya ha perdido la capacidad de reflejo en su mitad inferior.
Además, la misma vía sirve de entrada y salida. «Cuando se cruzan dos turismos de grandes dimensiones tienen que parar y maniobrar, ya no digamos el microbús de los trabajadores si coincide con otro coche», señalan miembros de la plantilla. Por oto lado, aquí vienen a diarios familiares de los 280 usuarios, una cifra que se ha rebajado a 240 precisamente a causa de las obras del tejado y otros trabajos menores que llevan meses realizándose. También son numerosas las furgonetas de reparto. Precisamente el cambio de tejado provocará la entrada de grandes camiones. «Alguien tendrá que estar en el cruce de la entrada para evitar que entren o salgan otros vehículos en ese momento», indican algunos trabajadores.
La entrada a esta residencia es un viejo debate, muchas veces solapado por otras deficiencias que han trascendido del interior. Pero lo cierto es que ni siquiera esa curva estrecha y revirada está bien señalizada, ya que los vehículos que llegan desde el centro de Oleiros no ven el cartel de señalización hasta pasar unos metros el acceso a la izquierda, lo que obliga a una peligrosa maniobra de marcha atrás.
El BNG de Oleiros realizó esta semana un ruego en el pleno del Concello, recordando que esta formación ya había elevado este tema al Parlamento de Galicia. Iria Taibo señaló ante la Xunta la necesidad de hacer simulacros para testar el problema ante una seria situación de riesgo. A este respecto, el responsable de Emerxencias de Oleiros, Juan Suárez, recuerda que hace años se realizó un simulacro y, aunque salió todo bien, reconoce que el camino de acceso «no es muy ancho, es bastante incómodo y se podría mejorar». «Si delante de la residencia empezaran a dejar los coches aparcados (en el interior hay que rodear el edificio para encontrar alguna plaza libre), entonces sí tendríamos verdaderos problemas», apunta el coordinador de los bomberos de Oleiros.
Los nacionalistas han preguntado por soluciones concretas, como la adaptación de un nuevo suelo urbano delimitado. Esta misma semana, la Xunta les respondió que «a Administración autonómica está a estudar melloras para o acceso do vieiro de dita residencia».
Por su parte, el Concello asegura que ya ha habido conversaciones con la Xunta a la que le ha ofrecido la solución de un nuevo camino ya abierto y ejecutado con aceras y todos los servicios donde se levantará una pequeña urbanización. Dicho camino, que comienza en la AC-181 junto al pazo de Pousada, pasa tangencialmente junto a la parcela de la residencia.
Consultada por este periódico, desde la Xunta señalan que están evaluando «as diferentes opcións e posibilidades que hai para mellorar este acceso. Non obstante, calquera cambio urbanístico, como a apertura de novos accesos, non depende neste caso da Xunta senón doutras Administracións que teñen as competencias nesta materia», indican desde Santiago.
Lamentan, además, que el Concello de Oleiros realizó mejoras en otras vías, como el Camiño real, «pero non se incluíu no plan estender estas melloras ata a zona na que se sitúa a residencia e o resto de vivendas privadas. De terse feito esta mellora na contorna do centro residencial, o acceso á parcela sería moito máis amplo que o actual. Non obstante, desde a Consellería de Política Social e Igualdade estanse estudando outras posibles vías para facilitar o acceso a este centro».