Se cumple un año del incendio que arruinó un vestigio del Art-Noveau en Oleiros. Derribada a espaldas de Patrimonio, ha entrado en los juzgados
30 jul 2021 . Actualizado a las 00:06 h.Cuando el verano pasado Japón cancelaba los Juegos Olímpicos, en la comarca se veían las llamas de un pebetero gigante. En la última hora de una tarde de julio la casa Carnicero era una peluca de fuego junto al puente de A Pasaxe, un incendio que encogió el alma de los vecinos del alto edificio colindante de ocho plantas que, finalmente, pudieron volver esa noche a sus casas. Concluía así el Día del Carmen del 2020, un pavoroso incendio del que se acaba de cumplir un año que ha visto caer dos veces esta joya arquitectónica de 1916 obra del arquitecto Rafael González Villar, realizada por encargo del industrial Enrique Carnicero Ríos. Tras el fuego, el segundo golpe lo recibió el último día de ese año, con un derribo promovido por el Concello de Oleiros y sin consultar en tiempo a Patrimonio de la Xunta.
La causa
La presunta presencia de okupas. La información sobre el origen del fuego se fue diluyendo con el paso de los días. Las autoridades atribuyeron la desgracia a la presencia de okupas, pero nunca llegó a identificarse a ningún responsable. Declarado a las nueve de la noche del día 16, los bomberos de los parques de Arteixo, Betanzos y el SEM de Oleiros tardaron hora y media en controlar el fuego. Esa misma jornada, antes de la medianoche, se declaró otro incendio en unas instalaciones deportivas de la urbanización Icaria.
Demolición
El Ayuntamiento lo anuncia a los pocos días. El 24 de julio del 2020, el alcalde de Oleiros anunciaba públicamente que la casa Carnicero sería demolida por motivos de seguridad. Toda la estructura exterior había quedado en pie, salvo la espectacular techumbre cottage. «O que quedou en pé son paredes de ladrillo resquebraxadas», señaló entonces Ángel García Seoane en Radio Voz aludiendo al informe del arquitecto municipal, que radiografió la casa Carnicero el día siguiente al incendio. Al mismo tiempo, el Concello trabajaba en la cesión de la parcela y los restos por parte de los propietarios un traspaso que se haría como donación el 2 de diciembre. Arquitectos y expertos
«Esa casa no se tira». No se había caído la hoja del mes de julio y ya surgieron voces que defendían el mantenimiento y la recuperación del edificio incendiado. Arquitectos y especialistas en Art-Noveau alegaron que la casa Carnicero era perfectamente recuperable si se tomaban las medidas a tiempo. El promotor de la iniciativa era Alberto Fuentes-Valcárcel, quien recibiría el respaldo de instituciones de renombre. Él realizó un amplio informe sobre el extraordinario valor patrimonial de esta vivienda y que también hizo llegar al Ayuntamiento de Oleiros.
Diciembre
La casa resiste las borrascas. Se llamaban Dora y Ernest, dos profundas borrascas con rachas de viento que superaban los tres dígitos por hora. Pero los restos de la vivienda de 1916 seguían en pie. Fuentes-Valcárcel lo consideraba como un símbolo de estabilidad y, al mismo tiempo, urgía a tomar medidas de protección. El Colegio Oficial de Arquitectura de Galicia (COAG) se sumaba a la causa. Los arquitectos recordaron entonces que, al estar catalogada, el derribo de la casa Carnicero debía recibir el consentimiento de Patrimonio de la Xunta. Pero el alcalde de Oleiros insiste en que nada ni nadie alterará su hoja de ruta para tirar la casa abajo, apelando a motivos de seguridad, de la que él es el responsable.
29 de diciembre
¿Cayó una pared del interior? Otra borrasca, esta de nombre Bella, derrumba una de las paredes interiores de la casa Carnicero, según el Ayuntamiento de Oleiros, y se desprende uno de los triangulos que da hacia la ría. El hecho motiva al gobierno local a acelerar la demolición, que anuncia para el día 30.
Fin de año
Derribo por sorpresa. El año 2020 y la casa Carnicero fueron de la mano en su desaparición final. Era la tarde del 31 de diciembre cuando operarios de López Cao se encargaron de tirar todo lo que había quedado en pie desde el incendio de julio. El Concello no hizo ningún anunció público para avisar del corte de carril en ese día de especial movilidad en el tráfico. Mientras, la formación Alternativa dos Veciños batía su récord en la emisión de notas de prensa desde el 28 de diciembre denunciando la labor de otros municipios donde tiene representación, lo que dio la impresión de una segunda cortina de humo sobre la casa Carnicero tras la del incendio de julio. El decreto de alcaldía que ordenó el derribo se comunicó a Patrimonio a las 14.40 del día 30, fuera ya de la atención al público y a pocas horas de un festivo laboral.
Reacción judicial
La Fiscalía investiga al alcalde y a tres técnicos. El PP de Oleiros denunció públicamente lo ocurrido al tiempo que inició un expediente ante la Fiscalía. Mientras el alcalde apuntaba en su medios municipales ejemplos de recuperación de patrimonio, las ruinas de la casa Carnicero entraban en el juzgado de Instrucción Número 1 de A Coruña. La Fiscalía ha denunciado expresamente al alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, y a otros tres técnicos. Los hechos están tipificados como «una infracción muy grave», que puede suponer penas de cárcel, aunque lo que realmente sobrevuela sobre los denunciados es una inhabilitación de varios años.
