Continúan las pesquisas en Oleiros para localizar al hombre que invitó a un niño a entrar en su coche

La Guardia Civil de Oleiros intenta localizar al hombre que el pasado día 15 propuso a un niño que salía de un entrenamiento deportivo entrar en su coche, cuando lo tenía aparcado en la zona de Icaria. Explican que la investigación sigue en curso, después de que la familia presentase la correspondiente denuncia en el cuartel, aunque indican que las gestiones serán difíciles dado los escasos datos de los que disponen. De hecho, el menor tan solo aportó en su declaración que el hombre era mayor, de pelo blanco y corto, con la dentadura en mal estado y que estaba sentado dentro de un turismo de color azul de tamaño mediano/pequeño, estacionado entre las calles Afrodita y Diana. Tanto la Guardia Civil como la familia, a través de un comunicado difundido por las Comunidad de Propietarios de la zona deportiva privada de las urbanizaciones Icaria II y III, solicitan la colaboración ciudadana para intentar localizar a este supuesto acosador. «Solicitamos la colaboración de todos los vecinos de la urbanización, de tal forma que si perciben la presencia de cualquier elemento anómalo que les llame mínimamente la atención, es muy necesario que lo comuniquen, sin demora, a la Guardia Civil o a los vigilantes de seguridad privada de la urbanización, dentro de su franja horaria de 20.00 a 08.00 horas», indican. 

En todo caso, expertos en asuntos jurídicos indicaron que, tal y como se formuló la denuncia, no se podría imputar un delito al supuesto acosador ya que tan solo se dirigió al niño pidiéndole que entrase en el vehículo, sin incitarle a nada más o llegar a propasarse con él. «Es una acción en grado de tentativa, pero tampoco se sabe cuáles eran sus intenciones. Solo le pidió que se sentara dentro, aunque podemos imaginar que su interés iba más allá de preguntarle algo», explicaron. 

Desde la comunidad de propietarios consideran que lo ocurrido el pasado martes es un «incidente de extrema gravedad». La madre del menor indicó que su hijo volvía a casa a las cinco de la tarde y que al girar hacia la calle Diana vio un coche azul aparcado. «El hombre le habló a mi hijo y le pidió que se acercase. Él lo hizo pensando que querría preguntarle algo y, cuando se acercó, le dijo que se metiera dentro del coche. Mi hijo se asustó y salió corriendo y, al girarse para atrás, vio que el hombre había salido del coche». Madre e hijo regresaron al lugar pero el vehículo ya no estaba. «Él no recuerda el modelo o matrícula, pero sí que había más gente por la urbanización, así que es posible que haya algún testigo», indica la madre. 

Profesionales de la educación infantil indicaron que es conveniente formar a los niños desde pequeños, tanto en casa como en los colegios e institutos, sobre el comportamiento que deben tener ante una situación de riesgo y las precauciones que deben tomar. En este sentido, responsables del CEIP Valle Inclán de Oleiros, enumeraron algunos de estos consejos, como insistir a los niños en que desconfíen de personas desconocidas o aportarles una visión positiva de las fuerzas de seguridad. «Es muy típico que se acerquen a los niños con pequeños cachorritos para ganarse su confianza, pero tienen que saber rechazar ese acercamiento si no está con ningún familiar o persona conocida al lado», indican. También explican que algunos padres les dicen a sus hijos cuando se portan mal que la policía o la Guardia Civil los van a llevar preso, en vez de promover que esas son personas de referencia en caso de verse en situaciones complicadas o de peligro. «Es a ellos a quienes tienen que pedir ayuda, y no huir por miedo», añaden. Comentan además que los niños entre 7 y 8 años ya son capaces de recordar la dirección de su domicilio, teléfono y nombre de los padres. «Datos importantes a la hora de localizar a las personas responsables de los menores», puntualizaron. 

Educadores del colegio Valle Inclán explicaron que, como en todos los centros, son los propios padres o las personas autorizadas los que entregan a los niños de infantil dentro del recinto. En primaria también se entregan los alumnos a las familias o personas autorizadas para su recogida y, en el caso de los niños con autorización para salir solos, tanto desde el colegio como del autobús, siempre se les recomienda que no se entretengan por el camino antes de llegar a casa, que no hablan con extraños, que busquen ayuda de algún adulto diferente al que le interpele y que, ante cualquier insinuación, su primera respuesta siempre sea «no». En todo caso, recuerdan que esta tarea educativa tiene que estar reforzada en casa. «También es una tarea de la familia», insisten. 

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