Los vecinos de Perillo se extrañan de la parálisis en las obras ya inauguradas. Fomento dice que es hora de «hacer mediciones»
12 feb 2021 . Actualizado a las 17:07 h.El 15 de diciembre del 2020 comenzaban, de forma oficial, las obras del cruce del Sol y Mar en Oleiros, una demanda vecinal y política en la que el epíteto de «histórica» se queda muy corto. El acto se celebró a 700 metros de la zona cero. Mientras el delegado del Gobierno, Javier Losada, y el alcalde, Ángel García Seoane, destapaban un mojón en las dependencias de la Dirección General de Tráfico, varios camiones con grúas eran visibles en el cruce, rodeados de obreros en zonas parceladas por biondas. Además de los 9,8 millones de euros del presupuesto, entonces se anunciaban 28 meses para la ejecución de los trabajos. El próximo lunes se cumplirán los dos primeros, y a varios residentes ya les ha llamado la atención la ausencia de aquellas máquinas y sus operarios. «Llevan semanas sin verse, de momento el tráfico no lo está notando porque no hay obras», explica un vecino. Donde el 15 de diciembre se ubicaba un camión en el cruce hacia Montrove, hoy crece la hierba y se acumula el agua de las últimas lluvias.
El Ministerio de Fomento niega la mayor. «Esas obras no están paradas. En la actualidad los trabajos del nuevo enlace del Sol y Mar (AC-12 en el término municipal de Oleiros) se centran en la detección de los servicios afectados, para lo cual se están realizando prospecciones geotécnicas mediante sondeos y zanjas en coordinación con los técnicos de los titulares de los servicios», explican desde Madrid. «Además, se está avanzando en la geometría de la obra con la realización de los trabajos topográficos así como con el protocolo de grietas en las viviendas adyacentes a la obra, en coordinación con el Ayuntamiento de Oleiros, una práctica habitual en este tipo de actuaciones y que tendrá un permanente seguimiento técnico por parte del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma)».
Efectivamente, vehículos con el rótulo de control y mediciones sí se han parado esta misma semana en el entorno del cruce del Sol y Mar. La inauguración de los trabajos ya había tenido que esperar más meses de los previstos a causa de la expropiación por parte del Concello de tan solo 7,4 metros cuadrados en las inmediaciones del aparcamiento de la Torre de Beiramar.
Cuando las mediciones concluyan, se espera el retorno de los obreros de las empresas Extraco, Misturas y Civis Global, encargadas de acometer esta obra durante los próximos 26 meses, al enlace del punto kilométrico 5,2 de la AC-12, donde se construirá una glorieta bajo la cual se soterrará el tráfico de la vieja carretera nacional.