Las fuertes lluvias siguen desbordando las diez balsas de decantación en las obras de urbanización de Xaz
OLEIROS
Tanto el Concello de Oleiros como la empresa que realiza los trabajos de urbanización confirmaron que son arrastres de tierra y que no se trata de un vertido contaminante
08 nov 2018 . Actualizado a las 11:26 h.El grupo municipal del PP advertía a mediados del mes de octubre que los trabajos de desmonte y explanación para construir viviendas y un campo de golf en Xaz podría generar la llegada de lodos a la playa de Santa Cruz. Y, con las primeras grandes lluvias, eso es lo que ha ocurrido. El pasado domingo hubo episodios que llegaron a los 160 litros por metro cuadrado y las diez balsas de decantación instaladas en la zona de obras de Xaz fueron insuficientes para controlar el torrente que aboca al Rego da Loba y al Rego de Xaz. Con el paso de los días la situación no mejora y ayer por la mañana el mar en Santa Cruz seguía teñido de marrón por los arrastres que llegan río abajo. Tanto el Concello de Oleiros como la empresa que realiza los trabajos de urbanización confirmaron que son arrastres de tierra y que no se trata de un vertido contaminante. En este sentido, explicaron que el sistema de decantación funciona bien, pero no está preparado «para esta magnitud de agua que ha caído durante tantos días». Desde la Xunta confirmaron que personal técnico de Augas de Galicia se desplazó hasta la zona para investigar la situación e indicaron que se están produciendo vertidos de tierra por las escorrentías de las lluvias «ao pasar por unha zona desvexetada» por las obras de la urbanización. Ante esta evidencia, Augas de Galicia solicitó a la empresa López Cao que refuerce los sistemas de prevención de vertido que estaban implementados. Tomadas las medidas, ayer por la mañana los técnicos de Augas comprobaron que las últimas lluvias «empeoraron sustancialmente la situación» y que las barreras de paja instaladas no fueron suficientes para retener los vertidos.
Agravante por reiteración
Desde la Consellería de Infraestruturas indicaron ayer que la situación actual «amosa unha maior problemática do inicialmente previsto» y se exigirá a la empresa «todas as medidas necesarias» para evitar que se repita la situación. Informaron también de que la empresa cuenta con una sanción previa «por un episodio parecido en xuño deste ano, e agora encarará un novo procedemento, que pode ter agravante por reiteración».