Gatocan denuncian presiones a una pareja de Miño para que se deshaga de sus gatos

T. Silva MIÑO

MIÑO

PACO RODRÍGUEZ

La protectora asegura que les han suspendido el servicio de ayuda a domicilio. Desde el Concello dicen que fue voluntad de los usuarios recudir el número de animales

24 feb 2023 . Actualizado a las 13:24 h.

La protectora Gatocan ha denunciado la delicada situación que atraviesa una pareja de Miño, ambos con discapacidad, y que viven en una casa de Bañobre con parcela para sus 14 gatos y dos perros. Joaquín, ingresado actualmente en el hospital, comunicó a Beatriz Marín, presidenta de Gatocan, que el Ayuntamiento de Miño les acababa de suspender el servicio de ayuda a domicilio hasta que no se deshaga de los gatos. Desde Gatocan aseguran que están esterilizados y desparasitados por la propia protectora. Además, los animales ya estaban en la casa cuando Joaquín y su pareja Ana, comenzaron a ser usuarios del servicios municipal. 

 Ana sufre disnea y tiene reconocida una incapacidad del 77 %. Joaquín, a causa de una poliomielitis, se encuentra postrado en una cama también con una incapacidad reconocida del 67 %. Padece además neuralgia del nervio trigémino. Ante esta situación, la portavoz de Gatocan contactó con los servicios sociales del Ayuntamiento de Miño, pero estos no la consideraron una interlocutora válida. «¿Qué quieren que hagamos? ¿Entregarlos a protectoras saturadas que no pueden más? ¿Porqué se tienen que deshacer de ellos?», se pregunta Beatriz.

Pero el Concello de Miño niega rotundamente «a veracidade dos feitos». «A situación actual desta parella é que o home, quen si dispón de servizo de atención no fogar, non se atopa na actualidade no seu domicilio», indican fuentes municipales. No obstante, acusan a la presencia de los gatos de generar una situación «de salubridade moi deficiente no domicilio», lo que dificulta el desempeño correcto de la labor de las trabajadoras del Servicio de Axuda no Fogar (SAF). 

Desde el Concello de Miño indican que fue el propio vecino el que propuso deshacerse de 10 de los 14 gatos. Pero desde el hospital, Joaquín niega esta versión: «Es mentira, lo hice porque ellos me obligaron a sacar los gatos de allí y negocié con mi mujer para quedarnos con cuatro, pero no sé qué hacer con los otros diez». El hombre señala que la falta de servicio no es por los animales sino por un conflicto personal cuando Ana pidió a una de las asistentas que limpiara unos azulejos. «Y le dijeron que eso no formaba parte de su trabajo». Según indica el propio Ayuntamiento de Miño «as competencias deste equipo de traballo limítanse ao coidado persoal deste home» e incluye baños, ayuda para limpieza del hogar y comida, entre otros. Apostillan que el servicio «seguirá a darse unha vez que poida regresar ao seu domicilio». Joaquín tiene previsto recibir el alta el próximo lunes.