Los ofrecerá a vecinos sin recursos por menos de 170 euros mes
02 feb 2021 . Actualizado a las 21:05 h.De símbolo de la burbuja inmobiliaria, con la construcción de la macrourbanización de Fadesa, a liderar una gestión social para el excedente de ese bum de la construcción que quedó sin vender. Ese el cambio de rumbo que pretende dar el Concello de Miño, que anunció que convertirá restos de ese estallido que dejó la construcción desenfrenada en el municipio en viviendas de alquiler social. La propuesta pasa por destinar a vecinos que no pueden acceder a un hogar a un precio de mercado viviendas deshabitadas.
El primer paso para que esto sea una realidad se dará el jueves, cuando se prevé aprobar en el pleno un convenio con la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), el conocido como el banco malo, por el que esta cede un total de doce viviendas al Concello de Miño. No todas están en la misma ubicación, pero algunas estaban en su día a la venta por 200.000 euros y la mayoría tienen vistas a la playa.
El Concello será el encargado de ponerlas a disposición de la ciudadanía como viviendas de alquiler social. Además, anuncia que reservará alguna para casos urgentes, como por ejemplo si necesitan alojamiento por situaciones de violencia machista.
Son edificaciones que actualmente están sin estrenar, vacías, y que el Concello se encargará de poner a punto para que puedan entrar a vivir los nuevos inquilinos, dotándolas del mobiliario y los equipamientos necesarios. Asimismo, ya se avanza que el precio mensual del alquiler será de un máximo de 160 o 170 euros.
Lo que fue la ruina de mucha gente ahora se convierte en ayuda para quien lo necesite»
El alcalde de Miño, Manuel Vázquez Faraldo, remarcó que «esta es una iniciativa pionera en Galicia». Explicó que «la burbuja inmobiliaria dejó un número importante de viviendas vacías en Miño, y otras sin acabar, por lo que le daremos la vuelta a esa bolsa que tiene la Sareb para convertirlas en viviendas sociales» y apostilló que «lo que fue la ruina de mucha gente ahora se convierte en ayuda para quien lo necesite».
El regidor recordó además que «esto es una muestra más de las políticas sociales que está llevando a cabo este gobierno local que no quiere dejar a nadie atrás y que se suma a la reciente apertura del ropero municipal» destinado a los usuarios de Servicios Sociales.