Miño recurrirá las sentencias que le obligan a pagar los intereses a los expropiados de Costa Miño
MIÑO
Al consistorio de Miño han comenzado a llegar sentencias por el pago de los intereses de demora a los expropiados en su día por el caso Fadesa para realizar la macrourbanización Costa Miño. El gobierno local anuncia que recurrirá el fallo, aconsejado por sus asesores legales, ya que cree que debería haber una sentencia única sobre el tema para saber a cuánto asciende el montante total y poder trabajar en un plan o en unas líneas concretas para garantizar ese pago.
El alcalde, Ricardo Sánchez Oroza, puntualiza que no se trata de cuestionar el abono de los intereses a los expropiados, sino de que el Concello debe conocer a qué debe hacer frente para poderlo encajar en las cuentas municipales.
Este nuevo varapalo judicial, que se esperaba y ha sido objeto de rifirrafe político, sucede cuando esta semana el ejecutivo municipal ha dado el visto bueno al pago de la primera cuota para la devolución de los créditos que ha obtenido del Fondo de Impulso Económico (13,7 millones), concedidos para hacer frente a la deuda principal.
Las expropiaciones de Fadesa se pagaran inicialmente a 6,23 euros por metro cuadrado, pero tras la reclamación de los propietarios se fijaron judicialmente en 25,9. Esto sucedió cuando la promotora de Costa Miño tenía ya problemas económicos y al no haber depositado el preceptivo aval, el Concello de Miño fue declarado responsable subsidiario.
Han pasado 14 años del inicio del proceso y ocho del fallo del TSXG reconociendo la deuda con los expropiados, lo que dificulta cifrar el coste que tendrá ahora el pago de los intereses, más teniendo en cuenta que hay un grupo que aún no los ha solicitado. Sin embargo, se estima que alcanzarán los 8 o 9 millones. Es una cantidad importante si se tiene en cuenta que la deuda municipal supera ya los 17 millones de euros y es un Concello que cuenta con un presupuesto prorrogado de 6,2 millones.