Denuncian la muerte de 17 reses por el ataque de lobos este año en Irixoa

A. S. R. IRIXOA

IRIXOA

cedida

La comunidad Monte de San Antón pide más ayudas a la Xunta

10 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

«Quede claro que non imos contra o lobo, pero tamén temos dereito a defender o noso gando. Convivindo co lobo é normal que de cando en vez haxa algún ataque, pero isto está sendo unha praga». José Manuel Bretón es uno de los 44 comuneros que forman la comunidad de Monte San Antón, en Irixoa. Llevan dos años especialmente duros respecto a los ataques de lobos -«lobos, si, témolos visto e gravados, e excrementos, e pisadas, non son cans»-, y piden una solución a la Xunta, algo más que buenas palabras. «Porque o persoal de Conservación nos trata moi ben, aténdennos ao momento pero seguimos igual». En los primeros siete meses del 2019 tienen un parte de baja muy detallado. En total, 17 muertes distribuidas así: «dúas vacas, dous potros e 13 becerros». Las cifras son peores que las del año anterior, cuando en total contabilizaron 13 bajas, «das que puidemos cobrar a metade». Todos estos datos los están trabajando para intentar dar un golpe de efecto en la Xunta y parar la sangría en el ganado que cuidan, actualmente un centenar de cabezas.

José Manuel Mato, biólogo experto en cinegética, reconoce que hay un «gran repunte» en la población de los lobos. «Hay grabaciones que han descubierto la presencia de un lobo en la parte trasera de la gasolinera de Coirós», explica Mato. «Lugares como Cambás o Curtis son de más tradición en cuanto a la presencia de lobos, pero Coirós, Irixoa, la parte baja de Aranga, es casi inédito», añade. Para este biólogo la solución es pagar todos los daños por parte de la Administración. «Nadie quiere la desaparición del lobo, pero tampoco es justo que su presencia la paguen unos pocos, y a los ganaderos los están acribillando con burocracia».