Los ciclistas critican la falta de respaldo a la movilidad sostenible, pero el Concello indica que apostará por unidades eléctricas
14 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.BiciCoruña se creó en el 2009 y tenía, a finales del pasado diciembre, 5.977 usuarios activos. Esa fue la evolución en la ciudad coruñesa de las bicis municipales, sin embargo, más allá de A Pasaxe, en Culleredo, el servicio municipal comenzó a funcionar el mismo año, pero dejó de funcionar hace cuatro. Fue el único concello que ofreció en el área esa posibilidad, pero no tuvo éxito. La pérdida de este servicio fue denunciada estos días por Roberto Rilo Díaz, portavoz de la Asociación de Ciclistas Crunia, en un informe de 47 páginas en el que cuestiona, entre otros asuntos, los proyectos de movilidad sostenible en Culleredo.
La iniciativa cullerdense se había llevado a cabo con la colaboración el Inega (Instituto energético de Galicia) y el IDAE (Instituto para la diversificación y ahorro de energía) y suponía un servicio de préstamo anual para los empadronados, con un coste de 10 euros al año, o de 5 a la semana para el resto de usuarios. Funcionaron tres estaciones, dos en el paseo de la ría (junto a la urbanización La Ría y junto al puesto de Turismo en la avenida Juan Carlos I) y una, en Vilaboa.
Desde la asociación Crunia se califica el proyecto de «fracaso absoluto», un hecho que vinculó al escaso recorrido para utilizarlas, aludiendo al paseo, aunque inicialmente se habían planteado dentro de la zona urbana de Culleredo. «El dinero público no debe tirarse en proyectos sin sentido y condenados al fracaso», cuestiona Rilo Díaz, que asegura que desconoce si el Concello cullerdense volverá a reponer el servicio.
Falta de respaldo
Desde el consistorio aseguran que Culleredo en bici fue un servicio que solo funcionó con regularidad los meses de verano y que el número de usuarios «foi exiguo e tiña un custe elevado». Explican que «non logrou un número de usuarios mínimo para que sexa un servizo que funcionase todo o ano e para que houbese beneficio na mobilidade». También avanza que frente a la propuesta de recuperar lo que había, pretende apostar ahora por la bicicleta eléctrica. En este sentido, precisan que ya están analizando las ayudas Next Generation para implantarlas e instalarlas en las proximidades de los corredores ciclables del concello, tanto en la zona urbana como en el rural.
«O que se vai a intentar é que ese servizo sexa compatible co de Coruña», avanzan, recuperando una idea que ya se había propuesto, pero que no llegó a llevarse a cabo.
El gobierno municipal puntualiza, al respecto de mejorar las vías ciclistas, que está previsto reformar todo el paseo marítimo después de las obras de dragado que se están ejecutando en la ría de O Burgo. También explica que con fondos europeos pretende llevar a cabo una senda desde O Xalo al río Mero, siguiendo el curso del río Valiñas.
El ejecutivo encabezado por José Ramón Rioboo también recuerda que están en marcha el proyecto de vía verde desde Bregua hasta Ceceda y la ampliación del carril bici desde Vilaboa hasta Castro Laxe.
Reutilización
El Concello había anunciado en el 2021 que recuperaría las bicicletas del servicio municipal, que cifraba en 200, para incentivar el uso de las dos ruedas entre los jóvenes del municipio. Había indicad que las destinaría a alumnado de los institutos, para que acudan a clase, y actividades específicas de asociaciones o clubes.
«Es imprescindible que ofrezcamos a nuestros jóvenes los medios necesarios para que puedan involucrarse en la reducción de la huella de carbono», había indicado el regidor.