La Laboral de Culleredo acogió una prueba con 22 participantes
30 may 2022 . Actualizado a las 08:24 h.Cuatro horas para montar la instalación eléctrica de un pequeño apartamento, a escala 1/5, es lo que tuvieron que ejecutar el jueves las 11 parejas, de ocho centros de Galicia, que participaban en la primera competición de FPSkills de Electricidad y Electrónica. La entrada de la Laboral de Culleredo fue el escenario para esta prueba de competencias, de la que no se revelarán los ganadores hasta la celebración de una gala en Santiago para todas las especialidades.
El experto que dirigía la competición en la Laboral fue el profesor Miguel Martínez Modroño, defensor de la FP básica y de dar visibilidad a unos alumnos que, por competencias, quedan en muchos casos relegados a la hora de participar en los Galicia Skills, donde pueden participar, pero donde tendrían que resultar elegidos entre alumnos de ciclos medios y superiores.
«A convocatoria foi un éxito», reconoce Martínez Madroño. Allí compitieron dos parejas de los CIFP A Farixa y Ferrolterra, y del IES Terra de Trasancos, además de dos alumnos de los centros A Xunqueira, Politécnico de Lugo, Universidad Laboral, IES Macías o Namorado, e IES María Casares. En el caso de la Laboral, Pablo Veiras Gude, 17 años y vecino de Brexo Lema en Cambre, e Ismael Matos Rodríguez, de 17 y de O Burgo, fueron los alumnos que se presentaron voluntarios a esta competición.
Martínez remarca que este tipo de pruebas también sirven para exponer las salidas de la FP básica, que supone una alternativa para el alumnado que, por distintas razones, no es capaz de finalizar la ESO. «É a única formación regrada que hai sen finalizar a ESO, senón estivese só habería a opción de reenganchar na ESA, de adultos», comenta. Este profesor explica que el perfil del alumnado que llega a este tipo de enseñanza arrastra diversas particularidades que no lo hacen encajar en el sistema educativo tradicional, desde dificultades de aprendizaje a de adaptación.
Acceso a otros ciclos
«Normalmente os grupos énchense, con clases duns 22 alumnos, hai un descarte polo camiño e a estas alturas do curso son quedan entre 15 ou 10 e o segundo pasan 5 ou 6. Un terzo queda polo camiño por moitas razóns, cústalles seguir os estudios, intentamos que se faga todo o práctico posible, pero hai cousas que hai que estudar», explica.
Susana Rey López, tutora de FP Básica de Electricidad y Electrónica en la Laboral, afirma que, en su caso, este curso arrancó con 19 alumnos, de los que siguen 15 en estos momentos, que cursan cuatro módulos, dos comunes y dos propias de electricidad.
A la FP básica acuden estudiantes desde los 15 años con autorización del tutor y hay alumnos hasta de 20 años. Aunque se relacione con descartes de otro tipo de enseñanza, Martínez y Rey señalan casos de alumnos que siguen hasta alcanzar la FP superior o que cursan alguna ingeniería. Ponen con ello el acento de las puertas que permite abrir.
«Eu este ano tiña un alumno en grado medio de FP básica que era o mellor estudante da clase, o alumno 10, que sempre estaba atento, traía a materia preparada, non é un imposible, no seu caso dicía que a ESO non lle gustaba, que lle gustaba unha parte máis práctica», explica Rey, que reconoce que en muchos casos el alumnado llega teniendo interiorizado que no vale. «O alumnado de FP básica está estigmatizado, porque foi apartado do sistema, a educación aínda non está preparada para a diversidade, aínda que o poña a lei», comenta Martínez Madroño, que apunta que «son alumnos estigmatizados cunha autoestima de grupo e individual baixísima, por iso unha das razóns que fixemos as FP Básica Skills é para que puideran demostrar que son quen de facelo ben».
Martínez también apunta que otra de las características de la FP básica es que predomina el alumnado masculino en muchas ramas. «Eu en electricidade tiña dúas alumnas o ano pasado, era unha excepción, en carpintería non había ningunha. O sesgo de xénero é máis forte canto máis abaixo no sistema educativo», resalta Martínez.
