«Es inadmisible que se tenga que cerrar un comedor que da servicio a 300 familias por la falta de seguridad sanitaria», explica José Ramón Rioboo
20 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Tras la decisión que el colegio Ría do Burgo se vio obligado a tomar —la de suspender el servicio de comedor escolar por no contar con los medios suficientes para garantizar la seguridad de los niños—, el Ayuntamiento de Culleredo se muestra «perplejo» por la falta de soluciones de la Xunta.
Así, el gobierno local exige a la Xunta que actúe de inmediato para que el colegio disponga de los medios necesarios que eviten el cierre del comedor. El alcalde, José Ramón Rioboo, indica: «Es inadmisible que se tenga que cerrar un comedor que da servicio a 300 familias por la falta de seguridad sanitaria». Asimismo, espera que la Xunta «corrija ya esta situación que supone una preocupación de calado para los usuarios». Para José Ramón Rioboo, la consellería no puede ser «insensible» al problema de conciliación de todas estas familias.
