Fue ingresado en el Chuac y se está investigando cómo sucedió el accidente
15 sep 2019 . Actualizado a las 17:04 h.Una salida de vía se saldó este sábado con un herido grave en Culleredo. M.C. conducía por la rúa Vicente Risco de Acea de Ama cuando por causas que se desconocen se adentró en la zona verde de la margen derecha y se empotró contra un árbol.
El herido fue atendido en el box de críticos de Urgencias del Chuac y tiene pronóstico reservado tras una colisión de gran violencia que dejó destrozado todo el morro del coche. El suceso se produjo sobre las 18.45 horas en un tramo de calzada recto que une el núcleo de Vilaboa con Acea de Ama y que va paralelo a la autopista AP-9. M. C. circulaba en sentido bajada hacia la zona de O Burgo en un Renault Megane blanco por una vía situada en la parte posterior de las instalaciones deportivas de Acea de Ama y en donde normalmente se instala el feirón.
«No había señales de frenada en la calzada», explicaba un testigo, preocupado por el estado del conductor.
Varios particulares que vieron el coche ya accidentado alertaron al 112 del suceso y este servicio avisó a numerosos equipos de emergencia a la zona. En un primer momento se indicó que había quedado atrapado en el amasijo de hierros al que quedó reducido su coche y se pidió la colaboración de varios parques de bomberos. Finalmente se desplazó personal del parque de A Grela, pero cuando llegaron ya no fue necesaria su intervención, ya había sido liberado por el personal del Servicio Municipal de Emergencias de Culleredo, que se desplazó allí junto a miembros de Protección Civil y la Policía Local.
El herido fue evacuado al hospital en estado muy grave por un ambulancia del 061 y la Policía Local está intentando averiguar qué pudo causar el accidente.
El 112 movilizó al accidente a los bomberos de A Coruña porque los del parque comarcal de Arteixo, el que presta servicio en Culleredo, estaba colaborando en la extinción de un incendio forestal en la parroquia de Monteaguado, que afectó a una zona de monte al lado de la AG-55. Los bomberos de Arteixo fueron porque el distrito forestal les dijo que las llamas estaban alcanzando el muro de la parcela de un chalé. Cuando llegaron ya estaban atacando el fuego, por lo que los bomberos de Arteixo optaron por prestarles asistencia, suministrándoles 14.000 litros de agua.