Estas asociaciones son solo para ellas

CULLEREDO

La directiva de As Berenguelas
La directiva de As Berenguelas

En Culleredo hay cuatro entidades donde las mujeres ganan por goleada. En alguna ni hay hombres

26 mar 2018 . Actualizado a las 11:23 h.

Ellas tienen mucho que decir y que hacer, y saben cómo. No necesitan hombres para ello ni en las directivas de sus asociaciones. En Culleredo hay cuatro entidades donde la presencia femenina, si no es total, al menos roza la mayoría. En días clave como el que se celebra el 8 de marzo, los actos se multiplican, pero ellas se encargan de que haya actividades durante todo el año.

La semana del 15 de octubre, cuando se celebra el Día de la Mujer Rural es otra cita a tener en cuenta en el calendario de las socias de As Berenguelas, un grupo de que mujeres rurales que hace un par de años decidieron juntarse. «Fixemos unha asemblea porque non nos viamos representadas no que queriamos facer. Porque nas asociacións que había no rural, porque haber hai moitas de veciños, e queriamos tocar temas de mulleres. Nós queremos que o rural medre, porque se medra tamén medramos as mulleres. Temos actividades deportivas pero tamén culturais, musicais...», explica la presidenta Pilar Iglesias, que sospecha que faltan porque la posibilidad de que llegaran al rural nunca se planteó. Dicen que no piden cosas inasumibles, por eso el Concello de Culleredo les está concediendo sus peticiones. Uno de sus últimos logros fue wifi para el local donde se reúnen. «Agora pedimos que nos desen un curso para podermos manexar na Administración, porque dentro de nada temos que facer todo por Internet, e queremos manexarnos sen depender doutra persoa, ser independentes». 

Para estar juntas

Hace 23 años que otro grupo femenino de Culleredo se juntó para dar vida á Xeca. Ya piensan en el fiestorro que montarán dentro de dos, cuando cumplan el cuarto de siglo, pero mientras, no pierden el tiempo. Los lunes, bolillos; los martes, pintura; miércoles, juegan la partida y meriendan; los jueves se lo dan libre y los viernes, que es cuando más gente va, toca tapiz. Así pasan las tardes. También salen del local que tienen en la Sagrada Familia (Vilaboa), hacen excursiones y comidas, tanto por carnavales como en el aniversario. Querían formar un grupo para estar juntas y jugar la partida, y poco a poco estas amigas, que en la actualidad son ochenta, se hicieron con un calendario intensivo. «Una vez al año vamos a Portugal porque ese viaje lo piden que no veas», comenta María del Carmen Naya, la presidenta, más conocida como Marujita. ¿A comer o a comprar? «Las dos cosas, pero lo que quieras comprar hoy lo hay por aquí en cualquier feirón, pero es la gracia de ir a comer el bacalao y a la feria».

Este año en mayo Alacada cumple 10 años. El medio centenar de mujeres que forman la asociación organizan actividades socioculturales, deportivas (un par de días a la semana), rutas de senderismo (una vez al mes), talleres como el de cocina que celebrarán próximamente y no se pierden una fiesta tradicional, desde magostos hasta carnavales. La portavoz de todas ellas, Teresa Fernández, asegura que esta asociación femenina surgió de un grupo de mujeres que querían retomar el contacto con las vecinas de la parroquia. «Estamos en Culleredo donde está el Concello, que está en una zona un poco desubicada de por sí, entre aeropuerto y expropiaciones, había poco contacto entre los vecinos y quisimos retomarlo». Las actividades están abiertas a ambos sexos, pero tienen claro que quienes mueven los hilos son ellas. «Tenemos una forma de ver las cosas diferentes, y diferenciarnos de una asociación de vecinos», apunta Teresa. 

Aceptan maridos

Llevando Rosalía de Castro de nombre, esta asociación tenía que ser de mujeres. Echó a andar en 1994 para que las mujeres no estuvieran tanto tiempo en casa, y a juzgar por la agenda de las socias actuales, que proceden tanto de Culleredo, de Oleiros como de A Coruña, la filosofía poco ha cambiado. Tienen bailoterapia, que es una de las actividades con más éxito, cursos de corte y confección, de cocina o labores. Pero no necesitan temática. «Hoy jueves, por ejemplo, se juntan y hablan de lo que sea, hasta de que caro está el plan», Antonia Alfeirán Pitusa. No se crean, también le dan al diente y hacen las maletas. Aceptan maridos, quizás a raíz de un curso que hicieron hace 20 años donde se enseñaba a los hombres a planchar.