Iniciaron la marcha en Culleredo y se fotografiaron junto a la torre de Hércules en una ruta a beneficio de Aspace y Adcor
18 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.«A los mayores de la residencia de Adcor les llevamos por la mañana los regalos que pidieron a Santa Claus, todo tipo de juegos de mesa; y a los chavales de Aspace nos los trajimos de ruta y acabamos tomando chocolate con ellos en María Pita», se emociona Aída Rado. Ella fue la organizadora, en colaboración con el Moto Club Culleredo, de esta tercera edición de la Papanoelada Motera, que suma adeptos cada año.
«No sé exactamente cuántos éramos, pero más de setecientas motos», precisa Aída, que explica que vino «gente de otras ciudades de Galicia». En concreto, de cuatro moto clubes de Lugo, dos de Ferrol y uno de A Laracha.
La ruta de la tarde, la más espectacular, arrancó a las cuatro y media desde O Burgo, para recorrer otras zonas de Culleredo y Cambre antes de entrar en A Coruña. Por el camino fueron saludando a los numerosos peatones que los jaleaban a su paso. «Junto a la torre de Hércules nos hicimos una foto maravillosa todos los moteros, antes de seguir nuestro camino hasta María Pita», relata la organizadora.
Los participantes en la Papanoelada disfrutaron en la plaza de una gran fiesta, en la que no faltaron los bailes, a los que se apuntaron los chicos de Aspace y numerosos participantes en este itinerario solidario.
La Papanoelada Motera se consolida año tras año en A Coruña. En la primera edición hubo unos cien participantes, que en la segunda fueron ya casi quinientos. Los más de setecientos del año en curso le auguran un excelente futuro.