Laura Brasil: «Me inspira el dolor, pero le meto una melodía feliz y cambia, queda bonito»

Fernando Molezún A CORUÑA / LA VOZ

CORUÑESES

Laura Brasil
Laura Brasil F. M.

La joven música acaba de ganar la Batalla de Bandas de Mahou y Estudios Mans

10 nov 2019 . Actualizado a las 19:51 h.

Laura Brasil tiene 19 años y una voz prodigiosa de la que parece que apenas empieza a ser consciente. El pasado fin de semana resultó ganadora -junto a los también coruñeses Moura- en la final de la Batalla de Bandas Mahou-Estudios Mans que se celebró en Vigo, lo le permitirá grabar en estos estudios y entrar en el circuito de conciertos tras el que está este iniciativa de apuesta por los nuevos talentos de la cervecera y la Fundación Paideia. Laura habla como si no terminase de creérselo.

-¿De dónde viene su vocación musical?

-Ya desde pequeña fui siempre muy pesada, porque cantaba 24 horas al día los siete días de la semana, y los que aguantaban eran mis padres. Me inventaba cachitos de canciones y las cantaba una y otra vez. No sé cómo aguantaban, la verdad. Y hace unos dos años y medio, más o menos, empecé a tocar el ukelele y la guitarra. Empecé a cantar canciones de otros artistas que me gustaban y también a componer mis propios temas.

-¿Se escuchaba música en su casa?

-Ahí tuve mucha suerte, la verdad, porque mis padres siempre han tenido un gusto musical magnífico y me alimentaban de música constantemente. En mi casa siempre estaba sonando música, y eso inevitablemente aumentó mi amor por la música.

-Tiene una voz fuera de lo normal. ¿Es algo que le sale sin más o tiene formación en canto?

-Ya te digo que siempre he cantado, así que sale así, natural. Pero empecé con clases de canto hace un año, en una escuela que está en San Andrés, y me está ayudando bastante. Porque no es tan fácil, una cosa es hacerlo sola en casa y otra pretender cantar en público.

-¿Hasta entonces no se había dado cuenta de las posibilidades que tenía su voz?

-La verdad es que empecé a sospechar que podía tener algo especial cuando alguna gente me empezó a decir que cantaba bien, pero yo nunca me había parado a pensar en ello. A mi me gustaba cantar y punto, lo disfrutaba sin más.

-¿Y cree que podría convertir esa pasión en una profesión?

-¡Hombre, claro que me gustaría vivir de la música! ¡Es un sueño! Pero por ahora lo estoy dejando fluir un poco. No quiero meterme presión, ni sentir que lo estoy haciendo por obligación. Es una pasión y no quiero cargármela. Lo estoy disfrutando mucho y me da miedo que pueda estropearse o que termine cogiéndole manía.

-Así que ni se plantea dejar los estudios.

-No, los estudios no los dejo ni de broma. Estoy haciendo un ciclo de peluquería en Someso. Con poder dedicarme a mi música, sería feliz. Pero sé que es algo muy complicado vivir de esto. Habrá que compaginarlo con otros trabajos.

-Las canciones que compone y las versiones que hace no reflejan los gustos mayoritarios de la gente de su edad.

-Sí que es cierto que mis gustos se apartan un poco de lo que escuchan la mayoría de jóvenes, supongo que porque tengo unos gustos muy variados. Me gusta tanto el rock y grupos como Guns N’ Roses o Red Hot Chili Peppers, como el rap con cantantes como Mac Miller o cosas más tranquilas como Ed Sheeran... Pero lo curioso es que a la hora de cantar me tiran otras cosas totalmente distintas. Me voy a canciones más lentas y melódicas que podríamos meter dentro del indie pop.

-¿Qué es lo que le inspira a la hora de componer?

-Normalmente me salen cosas muy tristes [ríe]. Sí, me inspira más el dolor. Pero bueno, luego le meto una melodía feliz y la cosa cambia, queda bonito.

Vida nómada. Aunque se define como coruñesa, Laura Brasil nació precisamente en Brasil: «Estuve allí hasta los seis años y luego viví en Estados Unidos dos años. Después ya me vine a A Coruña, y de eso hace ya once años», explica.