Comienzan los trabajos para demoler el hotel de pacientes, paso previo para la obra de los accesos del Novo Chuac

R. Domínguez A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Ángel Monteoliva, uno de los arquitectos del Novo Chuac, con el gerente del Sergas, José Ramón Parada, y la conselleira de Infraestruturas, María Martínez Allegue, en el inicio del proceso de demolición del hotel de pacientes del Chuac
Ángel Monteoliva, uno de los arquitectos del Novo Chuac, con el gerente del Sergas, José Ramón Parada, y la conselleira de Infraestruturas, María Martínez Allegue, en el inicio del proceso de demolición del hotel de pacientes del Chuac R.D.

El proceso de derribo durará siete meses y, según Infraestruturas, coincidirá en el segundo semestre del año con la licitación del proyecto constructivo del futuro hospital público de A Coruña

20 mar 2025 . Actualizado a las 13:59 h.

Con quince meses de retraso sobre el calendario anunciado inicialmente, tanto la Consellería de Infraestruturas, que tiene encomendada la obra del futuro hospital público de A Coruña, como el Sergas, dieron este jueves el pistoletazo de salida a la demolición del hotel de pacientes del Hospital Universitario A Coruña (Chuac). Su derribo, sin embargo, no será inmediato, ya que los operarios de la UTE Gestión Ambiental de Contratas, S.L.-Construcciones Orega, S.L  tardarán siete meses en hacer desaparecer un edificio de 7.691 metros cuadros de superficie construida en diez pisos, dos de ellos bajo rasante.

La conselleira de Infraestruturas, María Martínez Allegue, y el gerente del Sergas, José Ramón Parada, se citaron esta mañana en la entrada del hotel de pacientes con los arquitectos para conocer los detalles de una demolición que costará 1,3 millones de euros y que se hace imprescindible para acometer una de las actuaciones incluidas en el proyecto del Novo Chuac: los nuevos accesos y el anillo perimetral que bordeará todo el complejo para distribuir el tráfico a los diferentes servicios del futuro complejo sanitario.  

Así lo explicó Ángel Monteoliva, uno de los arquitectos del Novo Chuac, que puso el acento en que echar abajo el edificio levantado en 1973, aunque reformado en 1993, será una operación «delicada», definió, por su proximidad a los inmuebles sanitarios que han de mantenerse en funcionamiento.  Apenas un vial, seis metros de distancia, lo separan del hospital. 

«La intención es hacerlo de una forma lo menos dañina posible ambientalmente y que genere los mínimos problemas al Chuac», resumió el experto antes de detallar que los trabajos se dividirán en varias fases. La primera será el desamiantado de las cubiertas, un proceso especial previo a iniciar la demolición de las partes interiores manteniendo todavía el cerramiento existente para evitar ruidos y polvo. A continuación, se procederá a la demolición exterior, comenzando por las fachadas. «Luego con dos máquinas se irá por fases —prosiguió— primero con la parte de abajo para crear un espacio que pueda albergar el traslado de todos los elementos de la demolición, y una vez demolido el edificio, se generará una plataforma a nivel de la rasante». Monteoliva subrayó la importancia de tirar el hotel de pacientes, ya que «el  Novo Chuac lleva consigo la modificación del viario con un anillo perimetral que pasará justo por detrás de lo que es ahora el hotel, las obras empezarán pronto y necesitamos espacio».

En este sentido, la conselleira de Vivenda e Planificación de Infraestruturas, María Martínez Allegue, que calificó el arranque del proceso de derribo como «un fito» en el proyecto sanitario más importante de la Xunta, indicó que a comienzos del próximo mes de septiembre habrá finalizado la demolición, y no solo aseguró que «nas vindeiras semanas iniciaremos as obras dos accesos e do vial perimetral, con 24 millóns de orzamento», sino que también señaló que «xa está redactado tamén o proxecto para as seguintes fases do Novo Chuac, proxecto que está a ser supervisado por os técnicos da Axencia Galega de Infraestruturas porque contamos con poder licitar no segundo semestre deste ano 2025». 

Allegue se refirió a la complejidad técnica y logística de un derribo que deberá realizarse de forma simultánea a la actividad asistencial, que «en ningún momento se paralizará», y también en paralelo al tráfico en el entorno, que« tampouco se paralizará en ningún momento», insistió. Recordó que previamente se han llevado a cabo otras intervenciones, como  las expropiaciones cerradas «con mutuos acordos» con los propietarios  de terrenos e inmuebles en el entorno, que se reubicarán en la parcela de Pedralonga que se está urbanizando con una inversión de 3,5 millones, o las voladuras ya iniciadas para levantar el primer edificio del Novo Chuac, la torre polivalente, en la que se invertirán 35,2 millones de euros. Señaló la relevancia ahora de facilitar, con la demolición del hotel, los terrenos para el nuevo vial perimetral y los accesos, presupuestados en 24 millones, que «executaremos ó aveiro do convenio formalizado co Concello de Coruña, recentemente adendado para simultanear cronolóxicamente a exceucion das obras cos tempos da mesma». 

La titular de Infraestruturas repasó también los pasos previos que fueron necesarios para comenzar el derribo, como el acondicionamiento de Expocoruña para trasladar a los 160 profesionales del área administrativa que hasta ahora tenían sus puestos de trabajo en el hotel de pacientes, la construcción de los módulos para las habitaciones de los médicos de guardia, el vaciado del edificio rematado el pasado febrero y el traslado anticipado de servicios, como el laboratorio de urgencias. 

 «A demolición farase elemento a elemento, dun modo moi coidado, axeitado, eficiente, sostible e seguro», recalcó Allegue. En una primera fase, se derumbará el volumen correspondiente al salón de actos y a una parte del bloque administrativo, compuesto de tres plantas, mientras que en la segunda se abordarán el resto, incluyendo el denominado bloque alargado y el resto de las dependencias administrativas.

La conselleira reiteró que «este Novo Chuac é unha actuación prioritaria para Xunta, estratéxica, estamos a falar da prestacon asistencial para más de medio millón pacientes, dun complexo que triplicará a superficie hoxe en día dispoñible, e que excederá os 500 millóns, o maior investimento realizado endexamais por a Xunta nunha infraestrutura sanitaria». También aludió a la consecución de 60 millones de fondos europeos para el proyecto, «un logro salientabe porque a nosa comunidade autonoma foi a unica que superou todos os requisitos para acadar esta subsubvencion europea, é dicir, Galicia é a única que recibirá o cento por centodos fondos asignados a España para estas actuacons porque a UE está a recoñecer esta actuacion estratéxica desde novo complexo hospitalario da Coruña».

También el gerente del Sergas, José Ramón Parada, se refirió a la complejidad del Novo Chuac para poner en valor el trabajo realizado por Infraestruturas y por el área sanitaria de A Coruña y Cee para impulsar un proyecto que exige «acometer distintas actuacións en distintos frentes a un tempo: accesos, demolicións, aparcamentos, edificiacións... co hándicap de facelo sempre conservando a atencion sanitarioa con garantias». Enumeró pasos ya avanzados, como la puesta en marcha del aparcamiento provisional o la ejecución de la torre polivalente y la urbanización de Pedralonga, ambas en marcha, y recordó que una vez que esté finalizado el Novo Chuac contará con un 15 % más de camas que en la actualidad, el 50 % de ellas en habitaciones individuales, y el doble de consultas y puestos de observación.  «Hoxe con esta demolicion non estamos a destruir, senon que estamos a construir o futuro da sanidane non solo da área da Coruña, senon da sanidade galega», concluyó.