La Fiscalía llama a denunciar las agresiones a sanitarios y se compromete a agilizar las sanciones

R. D. A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

ANGEL MANSO

«A Administración pode ter parte de culpa, pero nunca se pode xustificar un acto violento», asegura el conselleiro de Sanidade, que anuncia la creación de un grupo de trabajo con el ministerio público, las fuerzas de seguridad, el 061, personal de urgencias, profesionales sanitarios y colegios médicos

13 feb 2025 . Actualizado a las 12:40 h.

El fiscal superior de Galicia, Fernando Suanzes, escenificó este jueves en la sede del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia con el conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, la preocupación por los ataques a personal sanitario. Tras una reunión en la que también participaron los fiscales provinciales, Suanzes subrayó que «os sanitarios teñen que saber que a Xustiza está do seu lado» y anticipó una serie de medidas acordadas para poner freno a «un problema creciente que non só afecta ó personal, senón a calidade do propio sistema sanitario e, por tanto, aos pacientes». 

En esta línea, aseguró que la Fiscalía prestará «especial dedicación» a estos asuntos y mostró la total disposición a colaborar en agilizar toda la tramitación que conlleva un ataque  y, en especial, las sanciones por estos delitos. Suanzes también incidió en la importancia de «promover a denuncia» de cualquier agresión, algo «absolutamente necesario para levar a cabo unha tramitación coherente e rápida», incidió, a través de los protocolos que ya mantiene con Sanidade. Por último, hizo un especial llamamiento a la sociedad, que «ten que ter en conta que garantir un espacio seguro para o persoal sanitario, tratar de protexer aos médicos é, en definitiva, tratar de protexer tamén a nosa propia saúde». 

El conselleiro de Sanidade agradeció la sensibilidad de la Fiscalía y la celeridad en responder a la solicitud de un encuentro para tratar de poner freno «a un problema importantísimo, que nos preocupa moito» y para el que, desde su departamento, «estamos dispostos a tomar todo tipo de medidas, algunhas preventivas e outras restrictivas». Además de la personación de la Administración autonómica en las causas judiciales, señaló que se llevarán a cabo campañas de concienciación entre la población general apelando al respeto a los trabajadores para resaltar la importancia de proporcionar entornos seguros de trabajo para la calidad asistencial. Paralelamente, se activará la revisión y actualización de los protocolos de seguridad, se agilizará la tramitación burocrática para resolver las denuncias cuanto antes, y se prestará asesoramiento legal a todas las víctimas. Anunció también el titular de Sanidade la creación de un grupo de trabajo, dependiente de la secretaria xeral de Sanidade, con todos los agentes implicados, desde los gestores sanitarios de la Administración a la Fiscalía a las fuerzas de seguridad del Estado, personal de urgencias, del 061, profesionales sanitarios y colegios médicos. 

Caamaño se refirió también a las críticas de los partidos de la oposición en el Parlamento, que vincularon el incremento de las agresiones con los recortes en la sanidad pública: «É unha opinión», dijo antes de subrayar que «calquer tipo de violencia é realmente intolerable, e cando se fai sobre xente que se dedica a coidar a outra xente, pois aínda máis. Podo recoñecer que a Administración pode ter parte de culpa nalgunhas cousas, pero nunca se pode xustificar un acto violento por un retraso nunha atención, nunca. A nosa obriga é que a xenta sexa atendida o máis pronto posible, pero non é unha disculpa», incidió.   

El titular del departamento autonómico aludió también a la agresión del pasado 3 de febrero en el servicio de urgencias del Chuac, donde un enfermero fue acuchillado por un paciente agitado de salud mental y un vigilante de seguridad sufrió heridas, para refrendar la actuación del gerente, cuya dimisión reclama la junta de personal. «A xerencia da área sanitaria de A Coruña desde o primeiro momento tomou medidas, implicouse profundamente», indicó el conselleiro, que enumeró entre las acciones adoptadas la revisión de protocolos, el refuerzo de medidas de seguridad, «a asistencia fíxica, loxicamente, pero tamén psicoloxica tanto aos afectados como ás familias, o reforzo dos sistemas de vixiancia dentro do hospital... leva tomado más de dez medidas co obxectivo de ataxar o problema e ofrecer seguridade aos profesionais que alí traballan». 

Dentro del plan frente a las agresiones a profesionales, la Consellería de Sanidade indicó que también está valorando adoptar nuevas medidas en determinados espacios físicos de atención a los pacientes mediante videovigilancia en pasillos y salas de espera de los servicios de urgencias o de admisión, así como extender la plataforma Acude, el denominado botón del pánico para dar la alerta ante cualquier ataque, que en la actualidad está instalado en 15.700 ordenadores de la red sanitaria gallega.  

En la reunión de trabajo mantenida en el TSXG participaron también la secretaria xeral técnica de la Consellería de Sanidade, Natalia Lobato; el director de Asistencia Sanitaria del Sergas, Alfredo Silva; la directora de Recursos Humanos del Servicio Galego de Saúde, Mar Pousa; el director xeral de Xustiza, José Tronchoni; el gerente de la Axencia Galega de Emerxencias, Marcos Araújo; y el gerente del área sanitaria de A Coruña, Luis Verde.