Tania Astray: «Para verme bien en una foto necesito al menos diez minutos»

Es candidata a un certamen denominado Miss RNB A Coruña. «Para ser reina de la belleza ya no hace falta ser alta y delgada. Ahora tiene mucha importancia la belleza interior», asegura Tania Astray López, coruñesa del 2000. A sus 24 años reconoce que «antes me sacaba defectos, pero ahora me veo guapa». Es de Culleredo y en la actualidad vive en Bastiagueiro (Oleiros) y se presenta al concurso con la banda de Barbanza. «Me tocó esta zona. Me hubiese gustado ir representando a A Coruña, pero fue por necesidad de los organizadores. Siempre quise ser modelo, desde pequeña me encantaba subirme a unos tacones de plástico y desfilar. Hice un curso y después contacté con la agencia que tiene sede en A Grela y que organiza las galas. Ya participé en un desfile y el 30 de noviembre será la final en Santiago. Me encantaría representar a A Coruña a nivel nacional», reconoce. Charlamos en La Granera de la plaza de Tabacos. Tomamos un café. Se le ve segura de sí misma. «Siempre quise ser modelo o profesora de niños, que son mi debilidad», reconoce. 

Apuesta por la estética

Dice que «todo lo que sea desfilar, ir de compras o el maquillaje me encanta. De los siete días de la semana, me maquillo cinco. La fotografía también me atrae mucho y me gusta subir imágenes a redes, en especial a Instagram. Para verme bien en una foto necesito al menos diez minutos. Soy perfeccionista e insisto hasta que me veo bien», reconoce Tania, que trabaja como esteticista. «Hice varios cursos y sigo formándome. Mi sueño es montar mi propia empresa. Me apasiona el cuidado del cuerpo», destaca. Ahora aparcó lo de la estética para centrarse en el certamen de belleza. «Es mi ilusión y lo que me propongo, lo hago. El esfuerzo de hoy es el éxito de mañana. Cuento con el apoyo incondicional de mis padres, a los que les debo todo. Mi madre es mi mejor amiga. Me dieron una buena educación. También tengo un novio que me empuja para arriba», confiesa. Va al gimnasio y hace todo el deporte. También intenta comer de la manera más saludable posible. «Me cohíbo un poco, aunque no renuncio a todo. Por suerte, por razones genéticas no tengo tendencia a engordar», comenta esta joven que es consciente de que los concursos de belleza no pasan por su mejor momento. «Me da igual, es mi sueño», sentencia Tania. 

Tatuaje por el abuelo

Se presenta a la charla vestida con sus colores favoritos. «Soy muy de blanco y negro. Me gustan los vaqueros flojos, las prendas oversize, y los tacones. No hay nada que no me pondría. Hay días que me cambio tres veces de ropa», reconoce. Se declara humilde y agradecida de las pequeñas cosas de la vida. «Creo que lo más importante es no olvidarse de donde vienes. A los valores que me inculcaron nunca voy a renunciar», afirma esta modelo que una y otra vez hace mención a sus padres. «Tengo un tatuaje dedicado a ellos y a mi hermano, que tiene un año y pico más que yo. También uno por mi abuelo». De hecho, le gusta pasar tiempo con la familia y a veces prefiere un plan casero a salir de marcha. «Me lo paso bien con lo simple, como tomar un café en una terraza. Soy más de sofá que festeira, pero cuando salgo me gusta beber alguna copa y bailar bachata o merengue, el reguetón menos. Iría a un concierto de Romeo Santos», comenta la candidata al certamen Miss RNB A Coruña. A la hora de comer se queda con la pasta y «prefiero la verdura a la fritanga. Mis amigas no lo entienden, pero soy más de judías, grelos o coliflor que de otro tipo de comidas». Como la mayoría de los jóvenes, dedica muchas horas a las redes sociales. El tiempo dirá si triunfa en el certamen de belleza, si hace carrera como modelo, si monta un centro de estética o si finalmente se convierte en profesora de infantil. «Creo que soy buena persona, pero tengo un carácter fuerte», asegura.

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