La propietaria de la Maazi y exdirectiva de Inditex cuenta su experiencia profesional y vital
03 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Habla claro. Es contundente y precisa en sus respuestas. Se nota su origen vasco. «Soy de Vitoria. Mi primer trabajo fue en una tienda de allí y poco después me llamaron de Zara. Estuve 25 años y estoy muy agradecida. Pasé año y medio en la primera que montaron en Nueva York y lo último que hice fue la creación de Uterqüe. Fui directiva de Inditex y se lo debo todo, es una empresa top», apunta Marian Fernández Orive, propietaria de la tienda Maazi de la calle Teresa Herrera, uno de los referentes de moda en A Coruña. Compartimos café en Pandelino y hablamos de ella, de su vida, de las tendencias, o de sus directos de los jueves en Instagram. «Los empezamos a preparar dos días antes. Los sigue gente de toda España que hace pedidos cuando ve lo que vamos mostrando. Llegué a abrir dos tiendas preciosas en Mallorca y Madrid, pero las tuve que cerrar por culpa de la pandemia. Pero eso hizo que nos conociesen en más sitios. La de A Coruña acaba de cumplir siete años y está muy consolidada y con una clientela fiel. Pero gracias a los directos subieron las ventas un treinta por ciento. La gente cree en mí por mi naturalidad y sinceridad. Es mi punto fuerte», relata. En la mesa de al lado hay una chica con una bolsa de Maazi. «La bolsa tiene mucha importancia, es fundamental. Lo descubrí hace años en Londres al ver una de Selfridges que era naranja con letras negras. La mía es color salmón fuerte y cuesta dinero, pero no la cobro».
Mi gran boda griega
Su vida casi da para una serie. Aunque ahora está asentada en A Coruña, vivió en muchos y pintorescos lugares. Y hasta su boda recuerda a películas como Mi gran boda griega o a Mamma Mía! «Me casé en Doxaro, un pueblo de la isla de Creta, y a la boda fueron 600 invitados. Yo solo conocía a unos 50, pero allí es tradicional invitar a la gente de los pueblos de al lado. Viví siete años en Grecia porque mi marido es de allí y hablo griego. Después hice una boda tradicional en Vitoria por mis padres», recuerda Marian, que tiene 58 años y dos hijos de 22 y 19. Por cierto, Maazi significa juntas en griego. Es una mujer deportista que le gusta pasear y practicar natación. Pasa muchas horas con el teléfono y, cuando desconecta, le gusta ver series o ir a tomar un vino con los amigos. Confiesa que, cuando está en modo relax, «no me pinto y me visto con sencillez. Me encuentro bien con un vaquero, nunca me verás con prendas de lentejuelas y purpurinas. No es mi estilo».
Ropa de entretiempo
Estamos en noviembre y casi no ha hecho frío. «Está costando vender abrigos y prendas gruesas. A estas alturas de otoño la gente sigue apostando por prendas de entretiempo. Se vende mucho vaquero, punto, camisería y complementos. Lo que compramos es fundamental y lo hacemos con seis meses de antelación», explica. Aunque la venta online está ahí, dice que el trato personal y la atención al detalle son parte de la experiencia de compra. «Prefiero decir que no que vender algo que no le sienta bien a la clienta. A mis empleadas les insisto en que hay que decir la verdad. Yo devuelvo el dinero porque quiero que compren con tranquilidad. En cualquier caso, las devoluciones son menos de un cinco por ciento, lo que indica que normalmente acertamos. Y la gente en lugar de los euros prefiere cambiar de prenda», destaca.
Se siente a gusto en A Coruña y una y otra vez habla de su proyecto empresarial. «Es algo personal. Refleja mi pasión por la moda y el diseño. Intento fusionar la elegancia con un estilo minimalista que ha enamorado tanto a las clientas locales como a personas de otros lugares. Es una propuesta de moda femenina, sofisticada y atemporal», resume. Le da la vuelta al móvil y echa un rápido vistazo a la pantalla para ver si hay alguna novedad. «Soy muy comercial, me sale con naturalidad», afirma Marian con su estilo firme.