Uniendo Pisadas, un programa de ocio con perros para menores hospitalizados en A Coruña
A CORUÑA CIUDAD
Las fundaciones María José Jove y del Inibic ponen en marcha la iniciativa en el hospital materno con el objetivo de minimizar los efectos que la hospitalización produce en los niños.
31 oct 2024 . Actualizado a las 12:05 h.La Fundación María José Jove, referente a nivel nacional en programas de terapias con perros, y la Fundación Pública Galega de Investigación Biomédica Inibic han firmado un convenio para poner en marcha Uniendo Pisadas: una iniciativa de ocio con perros de terapia para menores hospitalizados en el hospital Teresa Herrera de A Coruña, el materno del Chuac, y que se enmarca en su compromiso para minimizar los efectos que la hospitalización produce en los niños.
Los beneficiarios son menores del hospital de día y/o hospitalizados en la planta de pediatría y la actividad se lleva a cabo todos los miércoles en horario de mañana (de 10.00 a 12.00 horas). Las sesiones duran entre 20 y 30 minutos y se realizan para un grupo de entre 4 a 8 pacientes, están dirigidas por profesionales acompañados siempre de un educador canino.
Los canes son perros de terapia del Centro Canino Montegatto. Uniendo Pisadas se basa en la realización de actividades asistidas con animales para los menores en torno al cuidado y juego con perros de terapia buscando una mejora de los aspectos emocionales, ocupacionales y sociales del menor durante su ingreso. De hecho, si el participante va a ser sometido a un procedimiento diagnóstico o quirúrgico, la sesión se realizará previamente.
El objetivo es ofrecerle actividades interactivas y de naturaleza lúdicas como elemento distractor y humanizado de su estancia hospitalaria. En este sentido, una de las claves de este programa es que, para facilitar su motivación e interés, se implica al paciente en la selección de las mismas. Cada niño puede elegir cómo estructurar el tiempo de la sesión, permitiendo, además, el desarrollo de momentos de juego libre y espontáneo con el perro, así con períodos de descanso en compañía del animal.
Las actividades se agrupan en cinco grandes grupos: Conocimiento del perro: Información sobre el cuidado en general de los perros, así como la importancia de una buena relación con los animales; actividades de interacción con el perro; cuidado del animal: Limpiar, peinar, echar colonia, limar uñas...; ocupaciones de entrenamiento del perro; ocupaciones de ocio: Jugar a la pelota, circuitos, paseos, juegos estructurados.
Lorena Souto, supervisora de lactantes y una de las coordinadoras del proyecto indica que a lo largo de estos últimos tres años se ha realizado un proyecto de investigación en el hospital donde se ha demostrado los beneficios de esta actuación en la planta de pediatría. «Un ingreso hospitalario siempre supone un impacto significativo en la salud emocional del menor y con estas actividades se logra un ambiente más facilitador para el trabajo de los profesionales que formamos parte del hospital, además de contribuir significativamente a su bienestar emocional, ocupacional y social durante su estancia en el hospital».
Todos los perros que participan en el programa tienen un entrenamiento previo, específico como perros de terapia, que les permite desarrollar un temperamento tranquilo, dócil y obediente, así como la habilidad para poder adaptarse a diferentes situaciones y ser amigables con niños y en entornos clínicos y de atención.
Beneficios probados
La Fundación María José Jove es un referente a nivel nacional en programas de terapias con perros, tanto en el ámbito hospitalario, como de menores víctimas de violencia de género o del ocio para menores con necesidades educativas especiales. Actualmente, en el Hospital de A Coruña respalda también un programa en el que perros de terapia actúan como facilitadores terapéuticos en la Unidad de Rehabilitación Infantil y Atención Temprana.
Está en marcha desde 2006 y forma parte de un proyecto de investigación diseñado específicamente para explorar el impacto de los perros de terapia en niños con TEA y otros trastornos del neurodesarrollo en los primeros años de vida. El ensayo parte de la hipótesis de que existen diferencias significativas en la adquisición de destrezas psicosociales y en el nivel de participación social de los niños que asisten al programa de TAA, según el método que se utilice. La previsión es tener los primeros resultados a lo largo de 2025.
Para la Fundación María José Jove y la Gerencia del Área Sanitaria Integrada A Coruña y Cee, minimizar el impacto que la hospitalización produce en los niños y, por lo tanto, en sus familias, es una prioridad. Por ello desde el 2007 mantienen un convenio marco destinado a impulsar diferentes actuaciones que mejoren la calidad de los servicios, la asistencia y la estancia de los menores hospitalizados.