Huelga en los autobuses de A Coruña: «É máis importante a mensaxería, os paquetes, que levar vidas humanas ao teu cargo»
A CORUÑA CIUDAD
El seguimiento roza el 100 % en algunas de las líneas metropolitanas, las que más pasajeros afectados suman
28 oct 2024 . Actualizado a las 14:31 h.«A las 07.30 de la mañana estábamos en la estación de Carballo, los piquetes solo nos dejaron subir a nosotros al ómnibus, por el bebé. Venía al control médico, tuvimos casi que suplicar. Había chicos que iban a estudiar, gente que iba a trabajar y no la dejaron subir», cuenta Guillermo. Es uno de los pasajeros que espera en la estación de autobuses de A Coruña para regresar a su casa. Lo hace cargando con su bebé en brazos, él y su pareja. Para ir a Carballo el autobús es el único sistema de transporte público colectivo al que se puede recurrir.
La terminal coruñesa es uno de los puntos donde más se puede apreciar el alcance de la huelga convocada por los conductores de autobuses, y a la que se han sumado los empleados de tres de las compañías que comunican A Coruña por carretera con el área metropolitana y con los municipios y ciudades del resto de Galicia: Monbus, Alsa y Arriva.
«Vamos a O Burgo, pasan cada 15 minutos, hoxe levamos case unha hora. É que non pasa ningún, todos poñen fóra de servizo. Os servizos mínimos é que non van», cuentan Pilar y Javier, residentes de Culleredo. «Llegué a las 08.00, para el autobús de las 08.30 a Ferrol, son las 11.15 y ya ves. Ahora he vuelto a preguntar y dicen que no van a salir. El tema es que llevamos toda la mañana esperando y no nos querían decir nada, respondían que no podían hacer comentarios. Yo trabajo en Ferrol. En la empresa lo han comprendido, no quedó otra», comenta María, que ante la situación ha decidido desistir y volver a casa. Como ella, Sergio Mosquera, estudiante de Enxeñaría Naval, también se dirige a la ciudad departamental. «Llevo desde las 10.00 esperando, voy a Ferrol también. El autobús que yo cogía tenía que haber salido a las 10.30 horas. Monbus va bastante mal. Las primeras clases ya las perdí», explicó Sergio, que va y vuelve desde A Coruña todos los días.
«Levamos unha hora e cuarto esperando para ir a Arteixo. Normalmente pasan cada media hora», contó Carmen, otra de las usuarias afectadas. «Desde las 08.00 de la mañana estoy acá. No ha pasado ningún bus de Arriva. Uno solo salió para Lugo, de Alsa. De Arriva, absolutamente, nada. Lo del servicio mínimo, nada. A Carballo salían cada media hora. Supuestamente, había un porcentaje de autobuses que iban a estar saliendo, pero no los vemos», exclama Silvana, que tiene que ir a ver a su hijo a Carballo. «A ver se saio antes da noite», responde echando mano del humor Antonio, que también se dirige a Carballo y suma casi cuatro horas de espera cuando hablamos con él. Llegó a las 08.00 horas a la estación.
Mientras estos viajeros esperan en las plataformas de la terminal, los trabajadores controlan las entradas de la estación. «De momento, de aquí, da nosa empresa non saíu ninguén. Os únicos que saíron son os que van a Portugal. Conectan en Vigo con internacional. Non está a haber servizos mínimos», cuentan los conductores de Monbus apostados en la entrada que da a la calle Alcalde Pérez Ardá.
Iván López, presidente del comité de empresa en el Grupo Alsa y responsable de carreteras en UGT, es otro de los conductores concentrados ante la estación. Así explica los motivos que los han llevado a este paro: «Está a ser unha xornada tranquila, cun seguimento case total, do 90 %, e os servizos mínimos están dentro da normalidade, para nós, abusivos. Mesmo eu, presidente do comité, teño que facelos pola tarde. Facemos isto para negociar a aplicación dos coeficientes redutores. Estamos nun escenario no que, con 66 anos, imos ter que traballar. Levando rapaces ao colexio, excursións, xente do Imserso máis nova ca ti, e con xornadas de nove horas. A patronal de mercadorías si accedeu, por iso desconvocaron. Ao parecer, é máis importante a mensaxería, os paquetes, que levar vidas humanas ao teu cargo».
En las marquesinas de la ciudad, por donde pasan los urbanos, la situación no es tan desesperante para los que miran a la carretera esperando la llegada de su autobús. «Llegué hace un momento y acabo de ver cómo han salido dos de otras líneas, dentro de lo malo...», cuenta Claudia. «Si veo que tarda mucho, iré andando», añade mientras consulta la aplicación de Tranvías, la compañía que tiene la concesión del transporte urbano en A Coruña. Según el acuerdo alcanzando, destaca el Ayuntamiento, saldrán de cocheras el 70 % de los autobuses.
La siguiente jornada de huelga es el 11 de noviembre. Después, en diciembre, hay paros convocados para los días 5 y 9 y, si no hay acuerdo, los serán indefinidos a partir del día 23 del último mes del año.