Más alumnos, más fondos y la cuestión de las jubilaciones, la UDC mira al horizonte en un año de cambios
A CORUÑA CIUDAD
El campus coruñés ha visto reforzada su apuesta por la investigación con tres centros singulares
06 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Se cumple un mes del inicio del curso universitario. Un año con novedades en la Universidade da Coruña (UDC), como la entrada en vigor de la gratuidad de la matrícula, y con retos como adaptar los estatutos a la nueva ley de universidades, conseguir programas y ayudas internacionales o atraer nuevos estudiantes.
Matriculados
Breve retroceso respecto al 2023-2024. Con cifras todavía provisionales, la UDC cuenta con 13.315 alumnos matriculados en sus grados. Son 431 menos que los 13.746 del curso pasado. De ellos, 2.870 en A Coruña y 610 en Ferrol, son de nuevo ingreso. Esto sin contar a los estudiantes de doctorado y de másteres (en la UDC se imparten un total de 65 cursos de especialización). Para estos últimos hay un total de 1.668 huecos disponibles.
Vacantes
Grados que no llenaron plazas. En la UDC se ofertan un total de 54 grados universitarios. En diez de ellos no se consiguió llenar las plazas. Se trata de ocho títulos del campus de A Coruña, Enxeñaría de Obras Públicas, Tecnoloxías de Enxeñaría Civil, Estudos Lingüísticos e Literarios (Español), Estudos Lingüísticos e Literarios (Galego), Estudos Lingüísticos e Literarios (Inglés), Socioloxía, Turismo (a distancia) y el grado simultáneo en Inglés e Galego e Portugués. Los otros dos grados que no completaron aforo son del campus de Ferrol: Relacións Laborais e Recursos Humanos y Xestión Dixital da Información e Documentación.
Más demandados
Títulos con lista de espera. En la otra cara de la moneda están los grados y másteres con más demanda que oferta de plazas. En julio estaban cerradas la mayoría de las titulaciones. Además, hay másteres donde las preinscripciones multiplicaron la oferta de pupitres. Un tirón que no se limita a las especialidades técnicas, sino que también se extiende al área de humanidades. El Máster en Lingüística Aplicada, donde se ofertan diez asientos, tuvo 12 veces más solicitudes.
Alumnos extranjeros
Hasta el 75 %. En el Máster en Bioinformática para as Ciencias da Saúde, en el que participan tres centros universitarios, el 75 % de sus matriculados vienen de fuera de Galicia. Una tendencia cada vez mayor en los cursos de especialización y doctorados, pero no así en los grados. En la UDC contarán este curso con 500 alumnos extranjeros, de la misma forma que 600 estudiantes irán a completar su formación a otras universidades. Uno de los objetivos que se ha puesto el actual equipo rector es atraer a más estudiantes de otros países, y con el ojo puesto en Latinoamérica, ante la crisis demográfica. «É unha cuestión estratéxica, tamén para a autonomía», expresa el rector, Ricardo Cao.
Investigación
Tres centros distinguidos. Hace tiempo que la universidad dejó de ser solo un transmisor de conocimiento. También lo genera. Además de los grupos de investigación de las facultades, los centros creados para especializarse en I+D dieron este año un salto de calidad. Los tres del campus de A Coruña, el CICA (química y biología), el Citeec (infraestructuras y materiales) y el Citic (nuevas tecnologías) han sido reconocidos como centros singulares, un distintivo que hasta ahora solo tenía el Citic y que se traduce en más financiación. En los tres trabajan unas 600 personas. Además, la UDC ha captado a 92 investigadores de programas como el Ramón y Cajal y cuenta con 30 cátedras activas financiadas por empresas o instituciones. Otro modelo por el que apuesta el equipo rector es el del Centro Mixto de Investigación UDC-Navantia (CEMI). «Trátase dunha empresa pública, sería moi interesante ter tamén centros mixtos de investigación con entidades privadas de certo tamaño, e en Galicia témolas», valora el rector.
LOSU
Nueva ley orgánica. Una de las tareas que afronta la institución es la adaptación de sus estatutos a la ley orgánica de regulación del sistema universitario, la LOSU. En el Consello de Goberno de esta semana se acordó la creación de cuatro grupos de trabajo. Uno se encargará de la estructura de la UDC (campus, institutos universitarios y centros de investigación); otro de los órganos unipersonales y colegiados; un tercero se centrará en los servicios de la universidad, gestión económica y presupuestos, mientras el cuarto se dedicará a lo relativo a la comunidad universitaria. «A LOSU dá moita liberdade, temos que acordar que estrutura de universidade queremos», explica Ricardo Cao.
Relevo generacional, 126 jubilaciones en cinco años
El capital humano es uno de los sellos de una universidad, pero también su principal capítulo de gastos. En el caso de A Coruña, se lleva cerca del 70 % de su presupuesto. Y, dentro de este apartado, hay un asunto que el campus se prepara para abordar.
Como ya está pasando en la USC, más veterana, el relevo generacional llama a la puerta de Universidade da Coruña. Actualmente, el profesorado de la UDC es de 1.446 personas (no están aquí incluidos investigadores de programas como el Ramón y Cajal o Beatriz Galindo).
La edad media del cuadro docente es de 51,5 años. Además, 371 tienen más de 60 años y 128 más de 65 años. En la previsión de jubilaciones, hay que diferenciar las que son obligatorias (a los 70 años dentro del cuerpo de funcionarios), y que son las que se pueden anticipar. En el pasado curso hubo 27 jubilaciones, ocho de ellas voluntarias. De aquí al 2028-2029 habrá, como mínimo, 126.
«É importante que contemos cun financiamento estrutural que permita que se poidan consolidar carreiras de investigadores que agora están financiados con fondos de programas concretos e pasen a formar parte do cadro de investigadores fixos da universidade», dice el rector.
En este sentido, hay una figura, la de ayudante doctor del programa María Goiri, fruto del convenio del ministerio con cada una de las comunidades, y que aquí «estamos a punto de asinar», avanza Cao.
«En virtude do acordo, a UDC terá 30 prazas de axudante doutor que nos permitirán acometer nos vindeiros anos algúns dos cambios previstos na LOSU en canto a relevo xeracional», apunta el rector. En lo que va de este año, se aprobaron nuevas incorporaciones: diez cátedras, 19 plazas para profesores titulares y 42 de PDI (personal docente e investigador).
La cuestión de la endogamia
Una de las críticas que acostumbra recibir la universidad en toda España es la endogamia que se produce dentro de sus plantillas docentes. «Penso que aquí non é un problema xeneralizado da universidade. Temos que loitar e dispor os mecanismos para evitar que se produza. Neste sentido, a actual lexislación trata de poñer os medios. Por exemplo, desde que se aprobou a LOSU, as persoas que forman os tribunais teñen que cumprir unhas condicións que implican que, cando hai unha relación estreita cun dos candidatos, teñen que absterse. Outro punto é que ten que haber membros que proveñan doutras universidades. Son garantías que tratan de evitar que se produzan situacións endogámicas», defiende el rector de la UDC.