Concha Rodríguez Varela llega a la centena en la avenida de Alfonso Molina con buena salud
13 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Comer de todo, trabajar y una vida sana. Son las claves de la longevidad de Concha Rodríguez Varela, una mujer fuerte y vital que nació el 10 de agosto de 1924 en la aldea de Lousadela, en Guntín de Pallares (Lugo). Sopló sus cien velas rodeada de su familia en la cada en la que vive desde el 2018, la de su hija Conchita en la avenida de Alfonso Molina. Juntos hicieron una comida. Y no hay cosa que más le guste a Concha que comer. «Come de todo. Le encanta tomar el caldo y el tocino», cuenta su hija. Esta centenaria casi no toma medicación. No tiene colesterol, ni ácido úrico. Le funciona bien el hígado, el corazón, los riñones... «Nunca fue al ginecólogo, ni a una revisión», asegura. Su único problema ha sido de huesos. Hace años resbaló con una piel de plátano y se rompió una muñeca. En una caída posterior se rompió el codo y la otra muñeca. Después, fue el húmero. Pero lo lleva bien e intenta andar con cuidado. Por eso, aunque se levanta sin problemas los paseos los da en silla de ruedas acompañada de su hija. Solo tiene una, pero disfruta también de sus dos nietos y sus dos bisnietas, con las que juega alegremente y a las que espera ver crecer durante más años