El coruñés Julio Devesa, que obtuvo 42 puntos de 45, se formará el próximo curso en la universidad de música más importante del mundo
07 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.A Julio Devesa (A Coruña, 2006) siempre le ha gustado hacer las cosas por su cuenta, o eso es lo que afirma tras su paso por el instituto inglés Wells Cathedral School: «Me atrajo mucho la manera de trabajar que tienen; el profesor te introduce el tema y luego tú estudias y haces ejercicios en casa, además de que la corrección es mucho menos subjetiva porque los exámenes no los corrigen en el instituto», explica. Subjetivo o no, los hechos son los hechos: de 45 puntos que podría haber conseguido en el bachillerato internacional del Obradoiro, el coruñés ha alcanzado un total de 42. Esta modalidad de estudios científico-tecnológica, que incluía asignaturas a nivel superior como física y matemáticas, le ha servido al coruñés como preparación previa para su siguiente paso: las pruebas de acceso a una de las mejores universidades de música del mundo, la Universidad de Berklee, en Estados Unidos.
Desde pequeño, Julio ha estado interesado en distintos instrumentos, entre los que destacan el piano clásico y la guitarra. Tras dejar a un lado su pasión musical debido a la alta exigencia de sus estudios, la posibilidad de entrar a esta universidad le ha «abierto los ojos»: «La facultad a la que voy a ir es un referente en el mundo de la música. Desde pequeño siempre he querido, por lo menos, intentar entrar». Aunque el joven es consciente de lo extraordinario que puede resultar el hecho de comenzar el curso de producción y composición contemporánea tras un bachillerato enfocado en ciencias, no cierra la puerta a ninguna posibilidad: «Estaré mínimo 1 año y luego decidiré si me gusta la idea de hacer solo música. Creo que es un conocimiento común que el mundo de la música es difícil, así que una vez que esté allí veré si vale la pena sacrificar todo lo anterior y seguir con esto», afirma.
El gallego, que cursó el último año de conservatorio profesional de música este año, también tenía un plan B antes de que lo aceptasen: «Mi idea inicial antes de Berklee era hacer una ingeniería o bien en alguna universidad de Estados Unidos o bien en Madrid». Esta idea ha quedado en segundo plano tras conseguir una media que, según él mismo afirma, supera la de algunos alumnos de la Universidad de Harvard —de unos 38/39 puntos—.
Julio disfrutará ahora de los resultados de años de sacrificio, gracias a una beca que cubrirá casi el 50% de sus gastos, aunque reitera que no descarta la posibilidad de inscribirse a «otras universidades más técnicas», dejando atrás el sueño de dedicarse a la música.