Los señores del queso artesano de la feria medieval de A Coruña: «Hace diez años que no subimos los precios»

Y.G. A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

Ignacio Calderón vende queso artesano de Menorca en la feria medieval de A Coruña.
Ignacio Calderón vende queso artesano de Menorca en la feria medieval de A Coruña. Y.G.

Los amantes de este producto pueden adquirir ejemplares de Menorca, Cataluña o Asturias

28 jul 2024 . Actualizado a las 11:17 h.

La gastronomía es una de las propuestas que más clientes atrae en la Feira das Marabillas. El bollo preñao, el kebab o los crepes suelen ser los más demandados para comer o cenar in situ. Sin embargo, esta cita también es una oportunidad para hacer un poco de despensa y comprar embutido, repostería o queso artesanal. «Llevo viniendo desde hace unos diecisiete años y la clientela de A Coruña es una de las mejores de Galicia, son buenos compradores», explica Ignacio Calderón, propietario de El Predio Balear, ubicado en una de las entradas de la plaza de Azcárraga.

La muestra de ese buen número de compradores se evidencia al tratar de entrevistarlo. Casi no hay hueco entre los clientes que despacha, tanto nuevos como los que se acercan cada año. «Vas a tener que esperar un rato», dice al periodista. Su puesto está especializado en productos de Baleares. Tiene sobrasadas, ñoras, embutido y, sobre todo, quesos. «Nosotros somos productores», afirma. Una cualidad que le permite no subir los precios desde «hace diez años». «Todavía no sale a cuenta, pero cuando veamos la boca del lobo, que queda poquito, tendremos que subir el precio», añade.

Sus ejemplares son quesos artesanales que fabrican a partir de leche de vacas menorquinas y que posteriormente se curan en cuevas. «Tenemos opciones muy suaves y otras más intensas y curadas. Mi tío Nicolás es el que se encarga de afinar los quesos», cuenta. El precio ronda los 24 euros el kilo «y aquí la gente se lleva lo que quiera, desde pequeñas cuñas hasta piezas enteras», añade.

Ignacio recomienda que la siguiente parada de quesos artesanales de la feria medieval sea en un puesto asturiano. Se encuentra en la calle Santo Domingo, casi en la plaza. Está regentado por José García, quien nos recibe un poco más cansado de lo esperado porque anoche tuvo que volver a Asturias a por más piezas de queso debido a la gran demanda de los primeros días de feria. «Esta feria funciona muy bien, tuve que volver a Asturias a coger más queso. Marché anoche y acabo de volver», relata.

José solo lleva viniendo a A Coruña cinco años, pero ya son doce los que lleva dedicado a girar por toda España con estos productos. «Si eres soltero está muy bien, si tienes hijos pequeños es una faena. Yo, salvo en enero y casi todo febrero, el resto del año estoy girando», afirma.

Unos cuantos años más, hasta 20, lleva Cristián Oliver. Terminó en el mundo de los quesos por casualidad, pero ahora es un experto vendedor con productos de calidad. Tiene una opción de cabra que elaboran a mano en Cataluña. Y dos de gran formato y varios años de curación, uno que viene de los Alpes suizos y otro que elaboran a partir de leche de búfala.

Oliver está muy satisfecho con la gran respuesta que siempre da la ciudad: «A Coruña funciona muy bien, si no, no repetiría», dice. Además, tras más de dos décadas dedicado a la venta ambulante, ya tiene la vida montada. «Tengo una furgoneta que es vivienda, ya no voy a los hoteles. Aquí en Galicia hay mucho que ver, vivo de vacaciones entre semana y el fin de semana trabajo», relata.

En la Feira das Marabillas también tiene otros puestos donde se pueden adquirir quesos de Extremadura, de Galicia y de otras partes del mundo.