Una comisión técnica presentará la primera propuesta para la fachada marítima de A Coruña este año
A CORUÑA CIUDAD
La Comisión Coruña Marítima convocará además un concurso internacional para elaborar el diseño global
15 jul 2024 . Actualizado a las 19:17 h.La Comisión Coruña Marítima, el órgano que dirigirá el futuro diseño de los muelles urbanos coruñeses, celebró este lunes la reunión de constitución y ya hubo avances en cuanto a los plazos de trabajo. La alcaldesa y presidenta de la misma, Inés Rey, indicó que acordaron la creación de una comisión técnica, en la que participarán Juan Diego Pérez, el director del puerto, e Isabel Pardo de Vera, directora técnica del Plan Estratégico de A Coruña 2030-2050. Ambos se incorporarán, con voz aunque sin voto, a la Comisión Coruña Marítima, cuya próxima reunión será en octubre.
«A partir de aí daremos o inicio a eses traballos para a redacción dos documentos cos que traballaremos para ir definindo o futuro e cos que agardamos contar a finais de ano para poder expoñelos á cidadanía e que eles formen parte dese proxecto facendo as achegas e suxestións que sexan oportunos», explicó la regidora tras una reunión celebrada en la Autoridad Portuaria, en la que participaron representantes de seis Administraciones y de los grupos políticos municipales.
Según explicaron desde la Autoridad Portuaria, esa comisión técnica elaborará las bases para convocar un concurso internacional multidisciplinar para definir el diseño global que regirá la transformación de los espacios portuarios. Este diseño abarcará todo el ámbito del puerto coruñés y tendrá en cuenta los requerimientos y necesidades que exponga cada Administración, así como las aportaciones que se desprendan del Foro Coruña Marítima, que celebrará su primera reunión a principios del 2025 y contará con la participación de colectivos y agentes sociales relevantes de la ciudad.
La previsión es contar con los pliegos técnicos de este concurso internacional en los próximos meses, para poder llevar a cabo la licitación, indicaron.
La regidora destacó el papel de la Comisión Coruña Marítima, nacida de la reunión en mayo de este año de todas las Administraciones donde acordaron «unha folla de ruta para a transformación e o futuro da fachada marítima interior da cidade da Coruña, un proxecto que imos definir entre todos e baseado nos principios de coordinación e respecto institucional e, sobre todo, con visión de futuro para a cidade», recalcó.
«Comezan os traballos do que será o maior proxecto de desenvolvemento urbano da cidade da Coruña, o futuro desa Coruña do século XXI que afronta a súa grande modernización e que ten no reto do desenvolvemento da fachada marítima interior o maior desafío deste século», consideró la alcaldesa de A Coruña, que quiso recalcar «unha vez máis o consenso, o respecto e o traballo conxunto de todas as Administracións».
También explicó que se prevé un trabajo complementario entre esta comisión y la municipal, que preside el concejal nacionalista Francisco Jorquera. «Os traballos que se vaian desenvolvendo serán tidos en conta», reconoció.En la reunión participaron, además de Rey y del vicepresidente de la comisión y presidente de la Autoridad Portuaria, Martín Fernández Prado; Diego Calvo Pouso, el conselleiro de Presidencia, Xustiza e Deportes en representación de la Xunta; Pilar Parra Serrano, directora corporativa en representación de Puertos del Estado; Juan Pablo Villanueva Beltramini, director general de Construcción por el ADIF; José Manuel Lage Tuñas, concejal de Economía y Planificación Urbana en representación del Concello de A Coruña; Miguel Lorenzo Torres, del grupo municipal del PP; Francisco Dinís Díaz Gallego, del grupo municipal del PSOE; Francisco Jorquera Caselas, del grupo municipal del BNG, y como secretario participó Manuel Fuertes Carballeira, jefe del Departamento de la Asesoría Jurídica de la Autoridad Portuaria. Estaba previsto que participara también Carlos María Juárez Cólera, director del Sector Ferroviario por parte del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, pero fue sustituido y entró por videoconferencia Francisco J. Sánchez Ayala, subdirector general de Planificación Ferroviaria.
El portavoz municipal popular, Miguel Lorenzo, destacó, tras la reunión, que este encuentro «es un primer paso en el que es muy importante que todos tengamos el afán y las ganas de acertar en lo que hagamos en el futuro». «Hoy se ha dado este primer paso, se ha nombrado una comisión técnica y se ha hablado de un concurso de ideas para ver cómo vamos a desarrollar la fachada marítima», consideró. Lorenzo avanzó que este certamen tendrá en cuenta las aportaciones de todos los sectores e instituciones «que tienen mucho que decir de un proyecto que es el más importante para el futuro de la ciudad».
El reto de integrar 800.000 metros cuadrados en la trama urbana
La calendarización de los trabajos sobre el futuro de los muelles a través de una comisión en la que participan todas las Administraciones implicadas aporta esperanzas de que esta sea la apuesta definitiva por la transformación de la fachada marítima, después del fallido intento llevado a cabo en el 2004 a través de unos convenios que todas las partes dan ahora por superados.
Por el momento, pocas incógnitas se han despejado, aunque todas las partes hablan de trabajo conjunto y consenso en la necesidad de abordar, una vez por todas, la transformación de 800.000 metros cuadrados para la que ya se han dado importantes movimientos, con el inicio del traslado de Repsol, que opera desde hace ya más de un año desde punta Langosteira y que ya ha presentado el proyecto para desmantelar las estructuras que mantiene en el puerto interior. El ADIF también anunció el traslado de la estación de San Diego para facilitar la operación de los muelles.
Solución para la deuda
Hay acuerdo entre las partes en mantener la titularidad pública de Batería y Calvo Sotelo, donde se aceptan proyectos de concesión como la realizada ya a la Fundación Marta Ortega Pérez, pero no hay una decisión aún para San Diego y el muelle petrolero, donde se planteó un desarrollo residencial vinculado a la generación de recursos para la Autoridad Portuaria, que le permita pagar la deuda, de más de 260 millones, que arrastra de la construcción del puerto exterior.
Al presentar el proyecto Coruña Marítima se anunció un estudio del frente litoral desde el dique Barrié de la Maza hasta la dársena de Oza con el objetivo de «tener una visión integral y una coherencia conjunta en la definición de todo el espacio en términos de usos, movilidad, accesibilidad, explotación portuaria».
Constituida ayer todavía esa comisión, y a la espera de lo que digan los técnicos, lo que ya se conoce son las conclusiones presentadas a la comisión municipal (que funciona en paralelo) por el ingeniero Carlos Nárdiz, director del equipo de la UDC que elaboró el estudio de las líneas estratégicas para la reordenación del espacio portuario interior. El que no es un proyecto baladí se refleja en las cifras. Nárdiz cuantificó en 700 millones de euros esta transformación de la fachada marítima, que alcanzaría los 900 sumándole la deuda del Puerto.
Este ingeniero esbozó su propuesta para los muelles y apuesta por trasladar el edificio de la Lonja al muelle de Oza concentrando allí la pesca, modificar la avenida de Linares Rivas, barajando entre las propuestas la demolición del viaducto de Alfonso Molina; reservar el Centenario para el tráfico de contenedores, y acometer una regeneración urbana para la zona de San Diego, en donde se combinen espacios libres, zonas verdes y actividades pesqueras en el muelle. También expuso su propuesta para el espacio que dejará la estación de trenes de mercancías y que pasaría por crear «un gran parque con equipamientos» para el disfrute ciudadano. Además, ve posible que la estación marítima se asiente en Calvo Sotelo.
Nárdiz situaría el crecimiento residencial en el muelle petrolero, aunque reduciendo la construcción a menos de un tercio de los propuesto hace 20 años, cuando se barajaban 5.700 viviendas. La alcaldesa, Inés Rey, ya mostró su respaldo a que haya vivienda en esa fachada, porque considera que es una manera de generar vida en este nuevo espacio para el que paisajistas, urbanistas e ingenieros señalan que deberían incluir también instalaciones deportivas, culturales y edificios icónicos.