Piden 21 años de cárcel para el acusado de matar a un hombre en el barrio de las Flores, en A Coruña

Ana González Núñez
Ana González A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

ANGEL MANSO

La Fiscalía asegura que el sospechoso quedó con la víctima para pagarle un dinero que le debía y le asestó 18 puñaladas

02 jun 2023 . Actualizado a las 17:49 h.

La sección segunda de la Audiencia de A Coruña celebra la próxima semana el juicio contra el vecino de Santa Cristina (Oleiros) de 60 años acusado de matar a Francisco Javier L. F., en el barrio de las Flores en septiembre del 2021, asestándole 18 puñaladas. La Fiscalía pide para el detenido, que permanece en prisión provisional, 21 años de cárcel por un delito de asesinato.

Los hechos ocurrieron, según indica el ministerio público en su escrito de calificación de los hechos, el 23 de septiembre del 2021, cuando el acusado concertó una cita con la víctima con la finalidad, según decía, «de pagarle una cantidad de dinero que le adeudaba y este le venía reclamando insistentemente».

«El encausado, pese a contar con un trabajo estable como maquinista de tren, se encontraba en una situación económica angustiosa debido fundamentalmente a los gastos que le generaba su adicción a la cocaína. Por este motivo adeudaba dinero a otras personas y a distintas empresas de crédito, comerciales y de suministros y sus saldos bancarios arrojaban resultado negativo», explica el fiscal.

A las 10.30 horas del mencionado día, la víctima telefoneó al encausado y media hora más tarde, este le mandó un mensaje en el que ponía «salgo para ahí». Minutos más tarde, el acusado salió de su vivienda en Santa Cristina y se desplazó hacia el domicilio de Francisco Javier en la calle Lirios a bordo de su coche con el que cruzó el puente de A Pasaxe a las 11.22 horas. «Coincidiendo con su salida, concretamente a las 11.21 horas, el encausado apagó su teléfono móvil haciendo imposible con ello su geolocalización», detalla la Fiscalía.

A las 11.26 horas, el encausado llegó a la rotonda de la avenida de Monelos, estacionó frente a la casa individual de dos plantas en la que vivía arrendado Francisco Javier y accedió a la misma. Una vez en el interior de la casa, el encausado, «guiado del ánimo de acabar con su vida», se abalanzó sobre el hombre cuando ambos se hallaban en la parte superior de la vivienda y, «sin darle oportunidad de reaccionar ni defenderse», le asestó 18 puñaladas en la espalda y una más a la altura del esternón «sabiendo que parte de ellas eran innecesarias para alcanzar su objetivo y que únicamente producían el efecto de causar un daño añadido».

Entones, M. A. A. P., tras desconectar todos los interruptores del cuadro eléctrico, «salió de la casa a las 11.43 horas, cerrando con llave la puerta exterior» y se llevó consigo el teléfono móvil de Francisco Javier. Acto seguido, abandonó el lugar en su vehículo. 

De las 18 heridas incisas de la espalda, 11 alcanzaron el plano muscular y cinco penetraron en la cavidad torácica. Tales heridas le provocaron un hemotórax y la perforación de la arteria pulmonar derecha causando su muerte por shock hipovolémico, esto es, una afección de emergencia en la cual la pérdida grave de sangre o de otro líquido hace que el corazón sea incapaz de bombear suficiente sangre al cuerpo.

Siete días después

El cadáver del vecino de la calle Lirios no fue hallado hasta las 21.30 horas del 30 de septiembre, cuando el hijo de la casera accedió a la vivienda alarmado por la falta de noticias de su inquilino. El encausado fue detenido el día 3 de noviembre y posteriormente ingresó en prisión.

Francisco Javier tenía 53 años el día de su muerte y dejó a su fallecimiento como único pariente conocido a su hijo de entonces 27 años.

Para el representante del ministerio fiscal, estos hechos son constitutivos de un delito de asesinato por alevosía y ensañamiento. Por ello, solicita para el procesado una condena de 21 años de prisión y el pago de una indemnización de 75.000 euros para el hijo del fallecido.

Está previsto que el juicio, con jurado, comience el lunes y se extienda durante toda la semana.