Ethel Vázquez: «El Concello de A Coruña se desentiende del hospital»

El 9 de octubre del 2018, el entonces presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, anunció un nuevo hospital público para A Coruña. Más de cuatro años después, la obra «más ambiciosa e importante» de Galicia, afirma la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez (Santiago, 1972), sigue siendo solo un anuncio. Ingeniera de Caminos y vecina de A Coruña con raíces en Ponteceso, en una entrevista realizada este jueves 16 lamentó la postura del Concello de A Coruña por el cambio «sustancial, unilateral y sin avisar», asegura, en el convenio para dar luz verde a las primeras obras.

—¿Cuánto más se demorará el inicio del Novo Chuac? 

—Depende de la agilidad que tenga el Concello. Si esto fuera Pontevedra, ya estaríamos en obras. El retraso es enorme. Hemos perdido un tiempo muy valioso, ya podríamos estar en obras. Depende de la agilidad que tenga el Concello, pero visto lo que hemos tardado en firmar después del acuerdo marco de febrero del 2021… Seguimos en el punto cero del Novo Chuac. Ahora mismo no estamos ni en febrero del 2021 porque han roto lo pactado. 

—¿Cuál es el problema ahora? 

—¿El problema? Lo esperable era tener un aliado en un concello donde vas a hacer un gran hospital de más de 500 millones de euros, pero nos encontramos con un muro. Hay un gran problema cuando sucede eso.

—Es de suponer que el Ayuntamiento, que aportará más de 22 millones, tiene al menos el mismo interés que la Xunta en hacer el hospital.

—Nosotros hacemos infraestructuras hospitalarias por toda Galicia. Es fácil hacer el Hospital de Montecelo con el Concello de Pontevedra, es fácil hacer el centro salud integral en Lalín, estamos ampliando Santiago, Ourense… Cuando con el mismo esquema no es posible en A Coruña, creo que lo que aquí falla no es la Xunta. Cada vez que damos un paso, nos encontramos una caja de sorpresas y siempre son desagradables. Existe una total incoherencia entre lo que vemos y lo que se firmó en el acuerdo marco de febrero del 2021. Y podemos ir al histórico: primero que el Ayuntamiento quería una modificación puntual, después que querían expropiar ellos, les dijimos ‘lo que queráis', se dieron cuenta y entonces que mejor no, que lo hiciésemos nosotros… Es tiempo perdido, claro. Después el problema era el dinero, incluso nos insultaron. Era imposible abordar el tema, hubo que esperar a la reunión entre el presidente y la alcaldesa. Cuando quiso poner una limitación, la pusimos. Asumimos desde la Xunta los sobrecostes de las obras por la crisis de materiales aún cuando si te comprometes a algo debes asumirlo con todas las consecuencias, y aún así, bueno, accedimos. Y ahora nos encontramos con que, además de no tener las partidas acordadas, quieren ser titulares no solo de los terrenos, sino dueños y señores del hospital. Es rocambolesco.

Xunta y Ayuntamiento de A Coruña discuten sobre la titularidad del Novo Chuac

R. DOMÍNGUEZ

 —El Ayuntamiento insiste en que se trata de un ajuste administrativo menor, que es una fórmula jurídica aplicada en otros casos y que no altera el fondo del uso hospitalario a perpetuidad. 

—Pontevedra ha firmado, ¿por qué A Coruña no?. Creo que cuando, además de responsabilidades políticas, se tienen responsabilidades de gestión, es importante conocer los conceptos y trámites administrativos.Todas las infraestructuras sanitarias se han firmado con el mismo esquema, ¿por qué A Coruña no cuando además así lo firmaron en el 2021?. Si entonces sí, ¿por qué ahora no?. Hay mucha incoherencia. 

—¿El problema principal es la titularidad de los terrenos que se expropien? ¿Cree que a quien está en lista de espera o sin cama en urgencias le importa eso?

—Aquí hay dos cuestiones. Los compromisos tienen que venir seguidos de trabajo y gestión económica y administrativa. Aquí nos falta la disponibilidad presupuestaria, sabían que se necesita en el ejercicio del 2023 y no la tenemos, y eso también se incluyó en el requerimiento enviado a María Pita. Y segundo, nos hemos encontrado con la sorpresa, porque cada mes y medio hay una desagradable, que de repente cambian el convenio acordado en noviembre sin avisar y quieren ser titulares de los terrenos, que significa ser titulares del hospital. La Xunta quiere lo que quieren todos los ciudadanos: que se haga el hospital. Esperábamos tener un aliado, pero es muy difícil llegar a acuerdos con alguien que no quiere.  

«Seguimos en el punto 0 del Novo Chuac. Ahora mismo no estamos ni en febrero del 2021 porque desde el Ayuntamiento han roto todo lo pactado»

—¿Y qué gana el Ayuntamiento con el desacuerdo y los retrasos? 

—Eso hay que preguntárselo al Ayuntamiento. Yo, como coruñesa orgullosa de su hospital, porque el hospital sí que pone a Coruña en el mapa, creo que tenía que ser un orgullo volcarse para sacarlo adelante. A mí, ya no como conselleira, sino como coruñesa, me resulta incomprensible. Y creo que a la gente también. Un responsable público debería estar muy orgulloso de sacar adelante un proyecto como este, es el más ambicioso de la legislatura. Si quieren ganar o no tiempo, que responda el Concello. La gente quiere el hospital y la Xunta quiere lo mismo, que es lo que firmamos en el 2021. La Xunta no tiene que resolver los problemas de gestión o entendimiento del Concello. Es responsabilidad de la alcaldía, igual que yo tengo las mías. Espero que no haya más sorpresas porque yo no lo entiendo. Es una decepción ver que el Ayuntamiento se desentiende.

—¿...?

 —Se desentiende cuando un concejal, el responsable del área, remite al número dos de la consellería a personal técnico. Nosotros intentamos resolver en privado este tema, que nos llegó de repente. Se llamó al concejal en enero para preguntarle por qué habían cambiado en el convenio lo que se había acordado en la reunión de noviembre sin avisar. Intentamos todas las vías de entendimiento porque lo que queremos es licitar. Vivimos de hacer obras, disfrutamos haciendo obras que, además, necesitan los ciudadanos y los profesionales. Que la mayor infraestructura y el proyecto más ambicioso de la Xunta en Galicia, que sitúa a A Coruña en el mapa de la sanidad europea, triplica en tamaño y en posibilidades asistenciales y de investigación… Si esto no requiere implicación cien por cien de la alcaldía y la  concejalía, no entiendo entonces qué puede tener más importancia. El Ayuntamiento se desentiende, es lo que nos ha demostrado. 

—Pero el texto del convenio fue aprobado el 28 de diciembre pasado en el pleno de A Coruña con los votos a favor del PP. ¿Cómo se explica si, como afirma, presentaron un texto diferente al acordado en la reunión de un mes antes?

—¡Pero si a los grupos municipales no les dieron ni la documentación! Toda la oposición criticó en sus declaraciones que no les entregan los documentos. Vi las comparecencias y todos se quejaron. Ahí no entro, eso es tema del gobierno local con su corporación. Pero el Concello de A Coruña había quedado en una cosa con la Administración autonómica y lo cambió para el pleno sin avisar. Teníamos desde el 2021 un contrato con el Concello y con la ciudad, un acuerdo marco que para nosotros sigue en pie al cien por cien. Pero a partir de ahí, todo fueron incumplimientos por parte del Concello, no del PP ni del resto de la corporación. Lo pactado fue los terrenos y la financiación, que, por cierto, en el acuerdo ya figuraba que podían contar con otras instituciones. En Pontevedra el hospital cuenta con ayuda económica de la Diputación. La Xunta dio todas las facilidades, y lo que esperas es al menos la misma lealtad. 

«¿Táctica electoral? En toda Galicia hacemos obras con las fórmulas que ahora no le valen a A Coruña»

Incoherencia y decepción son dos de las palmas más repetidas por la titular de Infraestructuras

—Así las cosas,¿ahora qué?

—¡Eso me pregunto yo!. ¿A Coruña qué va a hacer? Nosotros queremos a hacer el hospital. Me pregunto por qué se rompe lo pactado. Aquí lo que rige es lo de febrero del 2021, sigamos por ahí. La coherencia te llama a eso. Ya hemos perdido muchos meses. Entonces marcamos un hito, ¿por qué ahora no vale? Esa es una reflexión que tiene que hacer el Concello. Merece al menos una reflexión.

«Esperábamos encontrar un aliado donde se va a hacer un gran hospital de más de 500 millones, pero nos encontramos un muro»

—¿Hay posibilidad de que la Xunta admita el cambio en la cláusula de los terrenos?

—Nosotros estamos dispuestos a hablar todo, pero no entiendo que sea un problema para el Ayuntamiento, no entiendo que pretenda ser dueño de un hospital cuando vamos a invertir más de 500 millones. Cuando todos los ayuntamientos acceden, creo que el problema no es la Xunta. Y no es solo el tema de la titularidad, se necesitan los compromisos presupuestarios del 2023 y no los tenemos. Hay dos cuestiones: la financiación que comprometieron después de darles muchas facilidades y la sorpresa que nos hemos encontrado en el concepto de adquisición de los terrenos, que vale al resto de las ciudades y concellos de Galicia y aquí en A Coruña resulta que no se puede. Es incomprensible e incoherente. En enero propusimos sentarnos muchas veces y en un mes nos remitieron a gente de tercer, cuarto nivel…. Nosotros no tenemos ningún problema, pero eso no es implicarse.

—¿Se va a poder reconducir la situación? 

—Espero que sí, pero no sé. No hay razón lógica para lo que estamos viendo, solo hay obstáculos. Cada vez son distintos, sales de uno y aparecen nuevos. Necesitamos implicación.

—¿Estaría dispuesta a sentarse mañana mismo para intentar resolverlo?

—Yo me siento donde haga falta. Mas volcados no se puede estar. Hemos tenido mucha paciencia, muchísima voluntad, hemos dado muchas facilidades, pero nos encontramos con un muro. 

 —¿Y tendrá que volver a pasar el acuerdo por el pleno?

—Yo entiendo que sí. El texto que llevaron al pleno del 28 de diciembre, lo hicieron sabiendo de antemano, el concejal al menos, que no iba a valer. Advertencias de que no era lo acordado en financiación había varias. No fue por no avisar. Lo de los documentos contables y que la anualidad del 2022 no era viable, que tenía que ser del 2023, que es cuando se desarrollará, sabían que no valía. Y lo de la titularidad de los terrenos, simplemente no nos informaron. Llevaron a pleno un documento que cambiaron sin hablar con nosotros. Lo vimos cuando en enero nos llegó la documentación, que tuvimos que reclamar,  y nos encontramos la sorpresa de que la financiación no es acorde con lo pactado y con lo de la titularidad de los terrenos.Todo incoherente con el acuerdo marco de febrero del 2021 y con lo pactado en la reunión de noviembre del 2022. ¿Llevamos año y medio trabajando y llevas algo a pleno diferente a lo pactado? Yo veo desentendimiento..

 —Les acusan de reactivar la polémica como maniobra electoral.

—Nosotros lo que queremos hacer es un hospital. Todos los que quieran serán aliados nuestros. Ya habrá problemas técnicos con la obra, que es muy compleja y los va a haber. Es una obra titánica, por el diseño, porque hay que hacerla manteniendo la actividad sanitaria, con expropiados para los que se ha propuesto un realojo pionero y único no sé si en España, pero sí en Galicia, para hacer esto de la mejor manera posible. Lo que queremos es hacer el hospital. Las peleas sobran, las cajas de sorpresas sobran. No hay  táctica ninguna, ni del PP ni de la Xunta. Hay un responsable, que es el Concello de A Coruña. ¿En Pontevedra es también hacer táctica política? ¿O en Ferrol? ¿O en Ourense? ¿Y en Santiago también? Porque en todas esas ciudades ya estamos ampliando hospitales y con las mismas fórmulas que las pactadas con A Coruña y que ahora no le sirven al gobierno local. 

—Entonces, ¿para cuándo las obras?

—Para sentarse, lo primero es la voluntad del Concello. A día de hoy, el concejal y la alcaldía, los responsables políticos, se han desentendido. ¿Para cuándo las obras? A veces, tener la razón es una mala noticia, pero ya habíamos advertido de que si no se firmaba el convenio, se retrasarían las obras. Para hacer las obras hay que expropiar y para expropiar hay que firmar el convenio. Estamos en disposición de licitar ya el primer edificio, la torre polivalente, y en marzo los accesos. Pero falta el convenio. De verdad que me gustaría dar una buena noticia porque estoy deseando licitar. 

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