Vecinos de Cuatro Caminos, en A Coruña, acorralan y logran detener a un caco habitual

Tamara Rivas Núñez
T. Rivas A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

La plaza Benito Blanco Rajoy en la que los vecinos acorralaron y detuvieron a un ladrón habitual
La plaza Benito Blanco Rajoy en la que los vecinos acorralaron y detuvieron a un ladrón habitual Marcos Míguez

Frecuentaba la zona en busca de coches abiertos en los que robar

11 feb 2023 . Actualizado a las 19:08 h.

La presencia de varios coches de la Policía Local a última hora del lunes en la zona de Cuatro Caminos hizo saltar las alarmas. Aunque en un primer momento circuló la posibilidad de que fuese a raíz de un atraco en un establecimiento de la zona, finalmente las patrullas del 092 se personaron en la plaza de Benito Blanco Rajoy alertados por unos vecinos que habían dado caza a un caco habitual. Según explicaron, el hombre suele frecuentar el barrio para comprobar si algún conductor que aparcó su vehículo en la calle se descuidó y lo dejó abierto, y aprovechar así para llevarse todo lo que puede del interior. Varios residentes observaron que estaba actuando bajo ese patrón, lo acorralaron y llamaron a la policía.

No es, ni de lejos, un hecho delictivo aislado. Residentes y comerciantes de la zona denunciaron a finales del verano que la criminalidad parecía haberse instalado en el barrio, donde la presencia de narcopisos y consumidores de droga pululando por las calles era algo habitual. El problema en el barrio había adquirido tal envergadura que los vecinos reunieron firmas para solicitar más vigilancia y presencia policial. A pesar de que el presidente de la asociación de vecinos A Barcarola de Cuatro Caminos, Juan Iglesias, asegura que esa solicitud tuvo sus frutos y se estableció un «contacto permanente» con la Policía Local, son muchos los comerciantes que consideran que no se ha reducido la delincuencia. Una panadera de la zona aseguró esta mañana en el programa Voces de A Coruña, de Radio Voz, que «en los últimos dos meses han robado en cinco comercios y algunas viviendas». Además denuncia que durante la noche los toxicómanos se juntan a consumir en algunos portales y que la calle Alcalde Marchesi se convierte en «una caminata de zombis». 

Desde la entidad vecinal piden «paciencia» a residentes y comerciantes para terminar con el problema de la delincuencia en el barrio. «Aunque notamos un descenso de la criminalidad, sí es cierto que quedan escollos, pero entendemos que es un problema de difícil solución, ya que hay que cogerlos con las manos en la masa», comenta. Iglesias anima a los vecinos a «llamar cuanto antes a la Policía y no esperar a ver qué pasa» y sostiene que los agentes del 092 «están al tanto de todas las incidencias» que se registran.

La ruta de la droga

Cuatro Caminos se ha convertido de un tiempo atrás en lugar de paso de muchos toxicómanos y camellos que trasiegan sin parar de un narcopiso a otro. Esa ruta de la droga, como ya la han bautizado muchos coruñeses, tiene uno de sus puntos negros en un bloque de viviendas de la calle Camino de la Iglesia en la zona de Monelos. Tras bajar por el parque de Oza, donde se reúnen a consumir, se dirigen a la plaza de A Cubela, cogen hacia Alcalde Marchesi y, desde Cuatro Caminos y Os Castros ponen rumbo hacia Os Mallos, O Ventorrillo y Meicende. Y, a lo largo de todo ese recorrido, la delincuencia hace acto de presencia

Una de las zonas de la ciudad más castigada por la criminalidad en los últimos días es el entorno de la avenida de Oza. El supermercado Gadis del 47-51 de la avenida de Oza sufrió este lunes un nuevo atraco, el segundo en apenas 48 horas, a manos de un hombre armado con un cuchillo. El modus operandi en ambos fue el mismo y todo parece indicar que se trata de la misma persona. Tras perpetrar el robo, el ladrón huyó a un edificio situado enfrente, en el 114 de la misma calle, otro de los narcopisos de la zona.  Durante la madrugada del lunes también intentaron robar en una panadería de la calle Gaiteira y en una cadena de pizzerías que hay frente al Gadis. 

Por si fuera poco, poco antes de la medianoche del sábado, un incendio destruyó un piso okupado y también vinculado con la droga en el número 41 de la avenida de Oza, a menos de cien metros del supermercado atracado.