Cesan a la concejala de Honras de Betanzos por un intento de «dedazo» en la elección de la reina de las fiestas

La alcaldesa de Betanzos, María Barral (PSdeG), cesó este viernes a Mónica Carneiro Cid como concejala de Mercados, Nomenclátor, Honras e Distincións, Eventos e Dinamización Asociativa. La regidora alegó oficialmente falta de confianza en la edila, que ya no participó esta semana en la presentación de la Feria Franca. Sin embargo, y según pudo saber este diario, el cese, que sorprende a un año de las próximas elecciones, se debe al malestar generado en el equipo de gobierno por la intención de Carneiro de nombrar «por encima de todo» a su sobrina como reina de las fiestas. Su familiar figuraba de primera en la lista de este año para ser Reina Mayor, pero el hecho de que en el 2020 y 2021 no se pudiesen celebrar las fiestas, debido a la pandemia, llevó a la Alcaldía a proponer que hubiese participación de las reinas de esos años, a lo que Carneiro se habría negado, primando que fuese su sobrina la elegida.

Desde la Alcaldía se convocó a una reunión con las familias de las tres reinas para proponer que todas participasen en las celebraciones este año, de manera extraordinaria, pero finalmente se optó porque no fuese un acto colectivo y se acordó realizar un sorteo entre las tres. Con esa decisión se evitaba lo que se consideraba un «dedazo» y desde Alcaldía se entendió como una opción justa. El sorteo, realizado por el secretario de la corporación, encumbró como reina de este año a Nerea Abruñedo Fernández, la joven que optaba al reinado en el 2021.

A partir de ese momento se sucedieron una serie de reacciones y situaciones internas que hicieron insostenible la relación y el día a día en el seno del Concello, lo que derivó en el cese de este viernes. Desde el gobierno local se entendió como su último «desplante» la ausencia de Carneiro en la presentación oficial de la Feira Medieval de la que su concejalía es responsable. La polémica por la elección de la reina ya había trascendido en los últimos días a la población, al publicar la hermana de la edila un texto en el que expresaba su queja por el trato recibido por su hija y en el que acusaba a miembros del equipo de gobierno de falta de respeto durante el sorteo.

Carneiro rechazó estas acusaciones y negó que intentase primar a su sobrina, pero dijo que defiende a su hermana y cuestiona el trato recibido por compañeros de partido. También aseguró que se siente como la concejala «más querida» de Betanzos y remarcó que no entregará su acta. Vincula su cese a la publicación de una carta por parte de su hermana, pero cuestiona que por ese hecho se haya puesto fin a «12 años de confianza», los que lleva en la corporación. «Mi hermana escribió una carta criticando a la alcaldesa y tres concejales y la repercusión de todo esto es que soy la concejala de la Feira Medieval y me acaban de cesar hoy, cuando empieza», cuestionó sobre el momento elegido para esta decisión, tres días después de que apareciesen publicadas las críticas. 

La hasta ahora edila de Mercados asegura que no presionó para que no se celebrase al sorteo, dice que aceptaron que se llevara a cabo y, afirma que el conflicto se originó por «el trato a una persona, en este caso a mi hermana. Yo estaba en esa junta y dije que no iba a consentir que se hablase mal de mi hermana y de mi ahijada». «No voy a consentir a ningún partido que tire a mi hermana por el suelo, no es por el sorteo, sino por el trato personal que se dio a una ciudadana de Betanzos», remarcó. «Estoy en un partido que se supone que es socialista, obrero y español, que quiere libertad de las personas para poder expresar lo que quieran en prensa siempre que sean respetuosas, pero al parecer siempre y cuando no ataques a la Alcaldía o a sus concejales. Yo estoy orgullosa de mi hermana», remarcó. 

Carneiro, que habla de maniobras para forzar otra elección de la reina de las fiestas, se mostró muy crítica con que después de semanas de trabajo no se le haya permitido disfrutar de la Feira Medieval, a la que anunció que irá igualmente tocando la pandereta en su grupo de gaitas. «Soy ciudadana de Betanzos y voy a participar en ella, eso no me lo va a quitar nadie», indicó. «Nadie pidió mi dimisión, hubo concejales a quien se lo pidió la  y la oposición y no han dimitido, ya dije que no dimitiría porque la gravedad del asunto no es para eso»,subrayó. «No voy a agachar la cabeza, son 12 años de trabajo dedicados en exclusiva y ocho sin ningún tipo de retribución y trabajando las 24 horas del día sin ninguna paga y sin haber cotizado», apostilló, recalcando que «siempre mostré mi lealtad con el Concello». «Yo seguí trabajando sabiendo que me iban a echar, si eso no es lealtad...», precisó. Rechazó las acusaciones de dedazo: «Ellos hicieron el dedazo para meter a otra persona, yo nunca pediría dedazo para nadie, el que me conozca lo sabe perfectamente, jamás actuaría así, jamás me he aprovechado del Concello», insiste.

El cese fue comunicado por la alcaldesa a la propia edila, cuyas funciones pasan de nuevo a ser competencia de María Barral. Asimismo, también se comunicó al PSOE tanto a nivel local, como comarcal y provincial.

Barral indicó que se trata de una decisión meditada después de escuchar e intercambiar opiniones con la propia concejala, con quien se reunió en varias ocasiones en los últimos días. Se trata de una «decisión dolorosa, por cuanto no es sencillo ni fácil tomar determinadas decisiones, pero en este caso, creo que esa pérdida de confianza nos lleva a una situación de no retorno y, por tanto, de separar caminos», puntualizó.

La alcaldesa agradeció el trabajo realizado en los tres años de mandato, si bien indicó, sin entrar en otras consideraciones, que «hubo alguna actuación que, como alcaldesa, no puedo compartir. Mi prioridad es que el trabajo del grupo de gobierno y del Concello en general se desarrolle en las mejores condiciones, ya que eso redunda en Betanzos y en estos momentos, con esta situación, no se estaban dando las condiciones adecuadas».

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