Xavier Fonseca
Esta semana no es precisamente la mejor para hablar de previsiones meteorológicas. Mucho se menciona estos días lo ocurrido el pasado sábado, cuando el pronóstico falló de manera estrepitosa. Se esperaba una jornada muy cálida que terminaría con fuertes tormentas. Pero ni una cosa ni la otra. «El problema fue que la Dana se movió un poco más rápido y venía acompañada de una nubosidad muy compacta que impidió que subiese la temperatura», reconoce Juan Taboada, de MeteoGalicia.
Aunque suele pensarse que los meteorólogos fallan a menudo, este tipo de errores no son para nada habituales. «Aemet no ha elaborado ningún estudio que permita explicar la causa del fallo. Desde mi punto de vista, pudo deberse a que los modelos no fueron capaces de pronosticar adecuadamente la posición de la baja cuyo centro se situó al oeste de Portugal. En todo caso, el número de fallos con importancia en los pronósticos a corto plazo resulta ahora mismo anecdótico», recuerda Francisco Infante, delegado de la Aemet en la comunidad gallega.